El Gran Zorn

Capítulo 3

"Estamos solos" 

Tras una serie de acontecimientos extraños en Masara, y al no tener una respuesta concreta, Danima se hallaba en una situación muy crítica; aún se encontraba fuerte en condición, pero sabía que no duraría  por mucho tiempo, ya que no conforme con las aldeas destruidas, varios masarianos comenzaron a desaparecer, y Danima sentía lo que estaban sufriendo, y aunque no era muy grave ese sufrimiento, estaba de a poco perdiendo sus energías. También estaba el dilema de quien era el culpable tras estos hechos tan terribles, se sentía muy frustrada por lo que eso también hacia que le restaran energías.

-Danima ¿estás bien?- Kido vio que Danima sufría un mareo 
-Si, si, no te preocupes, pero cuéntame, ¿cómo van las cosas en su aldea? 
-Nos ha sido difícil recuperar las cosechas, mi padre está hecho un lío, y como siempre, yo tengo que aguantar su furia contra mi 
-El solo pasa por un mal momento, así que no te desesperes, yo solo espero tener una respuesta...- Danima guardó silencio como si volviera a sufrir un nuevo mareo
-¡Danima! ¿Qué puedo hacer por ti?- Kido se alarmó 
-Tranquilízate, estaré bien, sólo necesito tomar un descanso
-Esta bien sacerdotisa, me iré para dejarte descansar
-Gracias Kido, y tengan paciencia, todo se solucionará, y tu también debes estar fuerte, para afrontar lo que venga, no tengas miedo de nada, y sigue siendo el mismo kibun de siempre
-Danima, lo dices como si te estuvieras despidiendo- Dijo Kido con un tono de preocupación
-Sólo te estoy aconsejando, no te preocupes Kido, ahora ve a hacer tus labores 
-Está bien sacerdotisa, nos vemos- Kido se alejo corriendo, Danima cerró los ojos y reflexionó las cosas...

Kido regresó a su aldea, intranquilo por la situación en la que pudiera encontrar las cosas

-¡En dónde está ese maldito kibun! ¡Necesito que haga la comida!¡Y que recoja este desastre!- El rey kibun se hallaba más explosivo que de costumbre, y Kido decidió no arriesgarse, y se aventuró al bosque de Masara, para encontrar algunos frutos que pudieran alegrar a su furioso padre...

[...]

-¿Y aquí vives? 
-Sí, lo he construido yo misma
-Es, sorprendente...- Ese ser misterioso que Lee descubrió en el bosque parecía mas tranquilo, después de haberle ofrecido un brebaje que ella preparó

-En vista de que aún no recuerdas nada, tengo que ponerte un nombre, me es difícil comunicarme contigo sin uno- Lee se sentó al lado de ese ser, quien parecía estar encantado con la casa de Le, ésta se conformaba de una pequeña nave (como la de Tänpo) que se encontraba algo destrozada, pero esas partes faltantes se reemplazaron con grandes ramas de árboles muy bien colocadas.

-Be 
-¿Ah? 
-Be será tu nombre ahora 
-Es un nombre raro- El ser quien ahora es Be, no se sentía muy convencido
-Por fin dices algo divertido- Lee sonreía muy emocionada 
-¿Y por qué te alegras tanto?- Be parecía extrañado 
-No lo sé, pero algo muy dentro de mí decía que no eras tan serio como aparentas 
-Y tú eres tan parlanchina- Be tenía un semblante serio 
-Oh vamos, no pierdas tu sentido del humor- Le animaba Lee 

Habían pasado algo de tiempo juntos, y se hicieron muy cercanos, tenían una conexión muy especial, y pareciera como si ya se conocieran de toda la vida, pero ninguno de los dos recordaba nada de sus vidas, y ambos compartían en común sueños (de dormir XD) un tanto extraños, ya que les era difícil descifrarlos, y eso los frustraba. Siempre se mantenían alejados de las aldeas de Masara, ya que Lee descubrió que ella era muy diferente a todos ellos, y sería difícil acercarse a ellos, por miedo a ser atacada o ser tomada como alguien peligroso, y de esto le advirtió a Be, quien un día vio a uno de estos seres, pero se alejó al sentirse extraño y sufrir ataques de jaqueca que de vez en cuando sentía. Pero a pesar de todo esto, Lee y Be se sentían bien estando juntos, ya que al ser ellos los únicos en ser iguales solo se tenían a ellos.

-Sabes Lee, ya no me importa si recuerdo o no lo que fui alguna vez, contigo me siento, seguro, todos esos sueños y dolores de cabeza, se desvanecen cuando estoy contigo- Be miraba atentamente a Lee, sus ojos y su mirada le daban seguridad, y pensaba en no separase nunca de ella
-Be, sé que juntos podremos sobrevivir a todo esto, a nuestros recuerdos, sueños, y a vivir escondidos. Y también estoy segura contigo- al ver fijamente a Be, una rápida visión se posó enfrente de Lee, era alguién... ¿sería acaso un recuerdo? Decidió ignorarlo, y seguir las palabras de Be, ignorar si recordaba o no.
-Prométeme, que a pesar de todo, estarémos juntos- Lee sentía necesaria esa promesa, no quería perder a Be
-Lo prometo- Be sintió el instinto de besar a Lee, como muestra de lo prometido, pero este beso, fue una puerta a un mundo de visiones para los dos, momentos rápidos pasaban por sus mentes, y sobre todo, fue una conexión tan fuerte entre los dos, que parecía que ya estaban destinados a estar juntos
-Ahora estamos solos en esto- Lee estaba más fuerte y segura.

Kido por fín había encontrado los frutos para su padre, pero algo extraño sucedió en el fondo del bosque. Kido jamás se había atrevido a adentrarse mas allá, pero decidió tomar valor para averiguar que sucedía.

Al llegar, vió una gran nubede polvo, y al desvanecerse ésta, encontró un ser sumamente extraño desmayado

-¿Qui-quién es usted?- Kido no sabía si acercarse o ir por ayuda
-Ayuda, ayuda por favor, estoy muy débil- la voz sonaba frágil, y muy baja, esto convenció a Kido a acercarse
-Primero, dime quién eres...?- preguntó Kido con miedo
-Soy...

Mientras tanto, en Masara, todo fue un caos total, ya ue la sacerdotisa del Sen, no se encontraba en ninguna parte, fue como si se la hubiera tragado la tierra, llegó la noche, y no había rastros de Danima

-Hay un anuncio que hacer- la imponente voz de los amos del fuego reinó en el campo de entrenamiento de Danima
-Danima... se ha ido de Masara- todos los masarianos empezaron a desesperarse y preocuparse, ¿y ahora que harìan sin su sacerdotisa?
-Lamentamos esta noticia, pero siento decir, que estamos solos- los amos del fuego agachaban la mirada.

Ya no había alguien a quien le confiaran sus problemas, se sentían completamente perdidos.

-Yo soy Be...

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¡Hola que tal seres del multiverso!

Ya no daré excusas ni pretextos al actualizar el fan fic, únicamente una enorme disculpa

Y bueno, espero y lo disfruten senkuns :D