Cap. 35 Te Escucho

10 0 0
                                    


Pasaban los minutos y cada ves el oxigeno se escapaba de mis pulmones, era bastante estresante. Es parecido a cuando estas en debajo del agua en alguna piscina o en el mismísimo mar abierto, salvo a que aqui.... No puedo mover si quiera mis dedos. Bueno es debe ser por los lazos que estan hasta entrelazados en estos. 

Conforme se me esfumaban las esperanzas de poder vivir o al menos respirar comenzaba a llorar. Siempre creí que es patético llorar, pero... Simplemente no pude evitarlo. Hasta mis ojos ardían. Pero, justo cuando emitía pequeños gemidos de dolor, sentí una tenue luz entrar por un pequeño espacio que poco a poco se hacia mas grande, esto acompañado por un insoportable ruido de una puerta chirriante. En realidad no se cuanto tiempo llevo aquí y cualquier ruido es el infierno para mi, mis oídos son ya muy sensibles y claro, no se si mi vista ah mejorado.

Una silueta de un hombre algo alto se quedo parada en la entrada de la puerta, justo detras de este salio otro que era mas claro ya por sus ojos que parecian dos foquitos de color dorado, este ultimo hombre parecia sonreir y avento creo que un saco de papas? Pero, los sacos no se mueven y no tienen forma, esta tiene forma de... una persona.

Sentia pasos que se acercaban a donde yo estaba. Comence a temblar de miedo.

-Oh, parece que esta despierta. ja, bueno, quiero decir. Consciente de lo que pasa. Cierto?. - Hablo una voz algo ronca y juguetona. -Chico, dale visión. -Ya me canse de temblar. Sentia mas pasos y pequeños jadeos apenas se escuchaban, el tipo que se me acercaba rápidamente me quito el trapo sucio que traía en mi cara, justo donde estaban mis ojos. La vista en realidad no ah mejorado mucho, solo que esta ves distingui perfectamente quien estaba a tan solo unos centimetros de mi rostro. Ese chico, que.... Me trajo a aqui. Alan. Me veia como si fuera una completa extraña y a decir verdad, ahora el es un completo extraño para mi. Parecia de mas edad de lo que era y bueno, tenia una horrible sonrisa cocida de lado a lado pasando aun en su boca, tal ves por eso no emitia ni una sola palabra. Ni siquiera se apiadaba de mi mirada que se mostraba pidiendo piedad....

-Vamos! deja de estar perdiendo el tiempo. Tenemos cosas que hacer... Pronto nos encargaremos de ellas. TU, por otro lado no nos sirves ahora. -El otro hombre que ya lo distinguia con mas claridad, volvio a hablar desde lo que parecia ser un rincon de la habitacion, con los brazos cruzados, creo. Note que Alan gruño o bueno se le veia algo triste. Me volvio a mirar pero esta ves me sostuvo del cabello, justo en la nuca. 

-Mghr...-Logre emitir con voz bastante cansada. Alan por otra parte me jalo mas acercándome a su cara, como si me fuera a decir algo en el oido. 

-Tha...that am I?! -Logro decir con bastante dificultad, pude sentir dolor en cada palabra que intentaba decir, pude notar que en su boca se le veia sangre cayendo. Si que estaba haciendo un gran esfuerzo por hablar. Lo veia directamente a los ojos, sin perder un solo gesto, nada, no demostraba absolutamente nada. Rapidamente me solto del cabello haciendo que me cayera y algo... era un cuerpo. Se fue del lugar sin decir mas. El otro chico cerro la puerta detras de el volviendo a hablar...

-Por cierto, dile a tu amiga que se deje crecer el cabello un poco mas. -Sonrio para luego irse tambien. 

A que se refiere con... Mi amiga? Esperen, que fue lo que dejo caer hace rato?

Reaccione y con la poca energia que tenia logra arrastrarme a donde recuerdo dejo caer el cuerpo. Esto me esta dando un muy mal presentimiento, solo espero que no sea lo que estoy pensando. Mis manos seguian atadas pero pude lograr voltear el cuerpo. Es Liz... Parecia estar dormida, eso espero....

Aunque parece no tener ninguna herida o al menos de gravedad, ademas que esta respirando y su corazon late. Suspire un poco aliviada al ver que se comenzaba a mover y de a poco se iba despertando, claro que se iba a quejar de algun dolor, ese tipo seguro que no iba a ser nada amable. Efectivamente, se quejaba del dolor e intentaba morverse pero lo que veo es que a ella tambien la ataron hasta los cabellos. Yo por otro lado de la nada me sentia cansada y sin energia de si quiera tener los ojos abiertos. Si no moria de la falta de oxigeno, moriria sin comer o sin agua o peor, a causa de estos tipos. Que puedo hacer? ahora Liz esta metida en esto cuando yo ya la creia salvada de esta pesadilla. Me sentia tan intil, sentia como si todo esto fuera mi culpa. Pero, no se como es que estamos todos metidos en esto, ni siquiera se desde donde comenzo todo esto... 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 01, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

[Quien Eres? Soy...] |Jeff The Killer| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora