OO : OO | renle

OO : OO

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Sacudió su abrigo y arregló un poco su cabello rubio, se acercó a los demás miembros y sonrió para la cámara.

Luego de terminar la sesión de fotos con los integrantes de Nct Dream, todos juntos se devolvieron a la empresa, en donde tomarían un descanso y pasarían un poco de tiempo juntos antes de que se marcaran las 00:00 en ese gigante reloj que colgaba en la pared de esa habitación.

Era 31 de diciembre de 2016. Faltaban unas horas para que terminase el año y al parecer todos la pasarían juntos.

Jisung y DongHyuck estaban sentados en le sofá del salón jugando entre ellos y riendo.

Mark estaba hablando por teléfono con uno de sus hyungs.

Y RenJun soltaba un bostezo de cansancio y se recostaba en el sillón más grande de ahí.

Chenle sonreía al ver lo lindo que se veía su Hyung en ese momento. Decidió acercarse y acariciar su cabello así el mayor lograra conciliar el sueño más fácilmente, como siempre solía hacer, pero una voz bastante gruesa para la persona que la portaba interrumpió su paso. Jaemin estaba a su lado abrazándolo por el cuello.

— Chenle. — apoyó su cabeza en el hombro de él y Chenle sonrió incómodo. En serio quería ir a hacerle cariño a su Hyung.

— Jaemin Hyung. — habló sonriendo nervioso.

Aún no dominaba muy bien el coreano y siempre era incómodo hablar con cualquier otro integrante porque no les entendía ni la mitad de las cosas que le decían y eso lo hacía deprimente.

Había veces en las que Chenle sentía que no encajaba entre ellos.

Veía la fuerte conexión que había entre ellos, sabía que todos a excepción de él y de RenJun se conocían desde que eran pequeños y desde sus comienzos en la empresa.

Por otro lado él y RenJun habían llegado ese mismo año y si bien fueron bien recibidos y les dieron todo el amor, aún así sentía que era un intruso entre ellos.

Habían tantas cosas que quería contarles a ellos, sus viajes, las presentaciones que hizo cuando era menor, de las cuales los demás eran conscientes pero él quería contarles los hechos con detalles.

Pero no podía.

Estaba eternamente agradecido con su mejor amigo, al integrante al cual era más cercano. A Huang RenJun.

El cual era su traductor, siempre iban hacía todos lados juntos, así el menor se enteraba qué decían sus demás compañeros de bandas. Aunque a veces notaba el cansancio en RenJun de tener que traducir todo lo que decían los demás, también notaba que a pesar del cansancio el mayor no cedía y continuaba hasta el final.

Y estaba feliz por tenerlo a su lado.

Chenle pensaba que su vida no podía ser más perfecta, no era presumido, tampoco lo mencionaba, pero en serio agradecía el rumbo que su vida estaba tomando.

Tenía amigos, tenía una familia que lo apoyaba en todo, tenía fans que lo amaban por sobre todo, tenía compañeros en los que podía confiar, tenía a RenJun.

No podía pedir más.

Pero siempre para conseguir aquello que tanto deseamos tenemos que muchas veces luchar por ello.

Porque le faltaba una cosa que hacía unos meses se había vuelto esencial en su vida.

Esa persona que se había vuelto tan importante en su vida que era hasta indispensable para él.