Confetti Falling 1 ©

Capítulo 16 -Pensando en Bianca

Narra Fer

Bueno, creo que definitivamente perdí a mi princesa..., no, simplemete no puedo aceptar que todo se quede ahí; tengo que reconquistarla, de algún modo...
Las lágrimas no dejaban de caer por mis mejillas, joder cuánto la amo...

Llegué a mi casa y la verdad solo tenía ganas de ir a mi cama y si era posible dormir para siempre.
Luego, ya estando sentado en la cama de mi cuarto, alguien toca mi puerta.

- Hijo, ¿puedo pasar?.-dijo mi mamá.

- Sí, pasa.-respondí.

Ella abrió la puerta, luego la cerró detrás de ella y se acercó para sentarse a mi lado.

- Hijo, ¿qué ocurre?, ¿por qué estás así?.-dijo.

- No quiero hablar de eso mamá.

- Es por Bianca, ¿verdad?.

- Sí. No sé qué hacer.-admití llorando😭

En ese momento, tocaron la puerta principal.

- ¡Francisco, abre la puerta!.-le gritó mi madre a mi hermano.

- ¡Ok mamá!.-respondió.

- Luego hablamos de esto, ¿sí?.-dijo mi madre mirándome y se fue; cerrando la puerta detrás de ella.
Yo me tapé la cara con una almohada y cuando ya me iba a quedar dormido...

- ¡Hola Fer!.-escuché.
Me destapé exaltado y oh, sorpresa, la persona que menos quería ver.

- ¿Qué quieres?.-dije sin ánimos a esa mala persona.

- Ay no seas así. Solo vine porque quiero darte ánimos y decirte que cuentas conmigo para todo.-dijo con su sonrisa de tarada.

- Si me quieres dar "ánimos", solo vete y desaparece de mi vida y la de tu hermana, ¿ok?.

- ¿De verdad no quieres a una mujer de verdad?.-dijo.

- Ya tenía una mujer de verdad y tú hiciste que la perdiera por tu maldita obsesión de estar conmigo.-dije frustrado.

- ¿Sabes?, tal vez esa niña no se merece a un hombre perfecto a su lado.-dijo. Ahhh, la quería matarr.

- Lárgate, antes que pierda la paciencia y me desquite contigo, zorra.

- Quieres que sea zorra, pues de acuerdo, lo seré, pero solo contigo chiquito.-dijo acercándose más a mí.

Narra Mary

- ¡Ma, uhm!.- no lo dejé terminar porque su madre iba a malograr todo esto. 

-Sshh.-le dije con mi mano en sus bellos labios.
Me senté en sus piernas y soltando poco a poco mi mano, lo beso suave y lo abrazo por su cuello.

Narra Fer

- Mary, deja uhm, de uhm, besarme uhm.-dije entredientes.

- No uhm.-dijo y siguió besándome.

De pronto, siento que abren la puerta de mi casa.

- Fernando está arriba querida. Sube.-dijo mi madre.

- Ok, gracias.-dijo...¿Bianca?.
Separé mis labios de los de Mary.

- ¿Qué ocurre cielo?.-dijo ésa.

- Cállate y vete por la ventana ahora.-le dije.

- No, te amo.

-Pues yo no, lo siento.-dije

- ¡Insensible!.-justo en ese instante que gritó; entró Bianca.

- Hola princesa.-saludé a Bianca.

-Hola, ¿podemos hablar?.- dijo con su voz tan suave y que me gustaba.