Diario de una asesina.

Prólogo

11 años antes
Esa hermosa niña de ojos negros mas puros que la noche, nadie se imaginaba que tras esa belleza se encontrara un alma oscura y malvada; que era manejada a través de pensamientos sanguinarios.
Creció sin el amor de sus padres, recibía solo golpes y maltratos y ella daba lo mismo a cambio.
¿Tú a esa edad que hacías? ¿Jugabas con muñecas?, ella jugaba con un hermoso cuchillo de hoja curva, filudo y con un mango negro. Dedicaba horas a pulirlo y a limpiarlo. Ya que siempre se ensuciaba con la sangre de esos animales, que corrían libremente en su patio trasero.
Era una sanguinaria, disfrutaba ver como la vida de esos seres se apagaba poco a poco, mientras se desangraban.
Sus padres no tenían conocimiento de esto, pero ellos tuvieron la culpa de que se hiciera así.
No se nace siendo asesina, se hace una.
Esos seis años creció con un solo pensamiento en mente: "hacer daño".
Esa es siempre su filosofía.
Así comenzó esta historia, con una niña que mataba animales hasta superar sus propios límites.

Este es el Diario de una asesina.