Un nuevo comienzo

13 3 4
                                    

-¡No os acerqueis a mí! ¡ dejadme en paz! ¡no he hecho nada malo!-
decía una niña de cabellos pelirosas mientras lloraba.

La niña seguia llorando mientras se acercaba peligrosamente a una esquina, a la vez que dos figuras putrefactas se acercaban a ella. Cuando ya estaba en la esquina no pudo evitar sentarse y temblar de miedo.

-¡Dejadme en paz!

Las  figuras se acercaban más y más, hasta que de golpe calleron al suelo. Detrás de esas figuras ya caidas en el suelo, una muchacha con un cuchillo ensangrentado, se erguia sin hacer movimiento alguno. La pequeña niña pelirosa reacciono y dijo:

-¿Qui, quien eres?

La muchacha no respondió,  solo se acercó lentamente. Y cuando ya estaba lo bastante cerca de la pequeña, le tendió la mano y dijo:

-Vamonos a casa, Emily.
-¿Quien eres?
-Solo...-se detuvo a pensar la respuesta- una conocida de tu madre. Venga vamonos a casa.
-¡No!
-Sè que estas asustada pero si vienes conmigo no te pasará nada.

Emily ,tremendamente asustada,  cogio la mano de aquella extraña muchacha que la había salvado.
Cuando ya estaba levantada del todo, pudo distinguir mejor los rasgos de su salvadora:
Pelo largo, liso y negro, ropa desgastada de colegiala y unos ojos de un extraño color un color que nuca había visto en los ojos de nadie, un color tan intenso que Emily solo habia visto en la sangre. Sus ojos eran de color rojo. Los ojos de su salvadora eran de color rojo. Emily no quiso decir nada, estaba demasiado confusa y asustada.

Su salvadora la guió hasta una puerta en la que esperaban dos chicos armados con pistolas.

-¿Y esta?-preguntó uno de ellos.
-Es la hija de Malla.-dijo la extraña pelinegro
-¡¿La hija de Malla?! pero si Malla esta...

Antes de que el muchacho pudiese acabar la frase, la muchacha le calló.

-Malla tenía una vida antes ¿sabes?
-¿Conoceis a mi madre?-preguntó Emily perpleja.
-Claro, ella nos enseñó a sobrevivir. -dijo el muchacho de pelo rubio.
-¡Que bien estoy deseando volver a verla¡-dijo Emily emocionada.

La cara de todos los presentes excepto la de Emily, se volvió seria.

-¿Que pasa? ¿ por qué esas caras?
-Veras tu madre...-se aventuró a decir el pelirojo.

Su lider lo miró de reojo, se acercó a él.  Y le susurró:

-Callate.
-Pero algún día lo tendrá que saber.
-Ese dia no sera hoy .
-¿Que le ha pasado a mi madre? - preguntó Emily temiendose lo peor.
-Te lo diremos, cuando lleguemos a casa.
-Pero...
-Nada de peros, anda vamonos.
-Espera, primero quiero saber tu nombre. Y el de ellos.
-Pfff... está bien... Yo me llamo
Xana y ellos son Oscar- dijo señalando al pelirojo que saludaba sonriente- y Max-dijo señalando al rubio que se erguia serio mirandolas por el rabillo del ojo.
-¡Encantada!-se limitó a decir Emily.
-Ahora que habeis terminado con las presentaciones... ¿Nos podemos ir?-dijo Max algo molesto.
-¡Sí!-dijo Emily sonriente.

Bueno gente aquí os traigo un nuevo libro y tardaré mas en escribir algunos capítulos porque tendran escenas realistas o irreales.
Elegid a vuestro gusto.

Rojo como la sangre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora