Al terminar el reciente Gran Prix Final el ahora matrimonio decidió que era hora de formar una familia, a sus 25 años Yuuri Katsuki sintió que estaba listo para concebir a un bebé y a sus 29 años Victor opinó que no se estaba haciendo más joven.
–¡Vicchan!–.gritó Yuuri al salir del baño–¡Vicchan!, dio positivo ¡tendremos un bebé!
Víctor se levantó rápidamente y abrazó a Yuuri con todas las fuerzas que tenía.
–¡Seremos padres!–.la pareja casi saltaba de la emoción.
–Le escribiré a Phichit-kun para decirle la noticia–
–¡No, espera!–.exclamó arrebatándole el celular.
–¿Qué pasa?
–Organicemos una fiesta para decirles–.Victor hizo un puchero–Por favor.
Y Yuuri no podía decirle que no a esa cara.
–Esta bien, hagámoslo.
–¿Quieres que lo hagamos ahora?–.dijo Victor con una expresión confundida en el rostro, Yuuri solo pudo golpearse la frente.
–Hablo de la fiesta.
–Ay, verdad.–ambos rieron.
–Bien, hay que comenzar a planear.–Yuuri tomó una libreta–Mmm ¿Donde haremos la fiesta?
–No lo sé.–frotó su barbilla–¿Qué tal si hacemos la fiesta en el mismo sitio donde nos casamos? –Eso sería... romántico.–Yuuri se sonrojó por la idea.
–¿Entonces allí será?–.su esposo asintió con la cabeza.
–Pero debes asegurarte de que esta vez no haya un tubo de Stripper.– acomodó sus lentes–Y solo habrán copas para brindar.
–Relajate, tengo todo controlado.
–Hablo en serio, Victor, quiero que esta vez sea diferente.
–Tranquilo, no pasará nada fuera de lo normal... espero.
Yuuri dio un suspiro y prosiguió –¿invitados?
–Invita a Chris, a Yurio y a ese kazajo malhechor que tiene por novio.–esto último lo dijo con un tono un poco rencoroso, ya que la pareja queria a Yuri como si fuese su hijo.
–Ya te dije que Otabek no es un malhechor, Victor.
–Como digas–dijo Victor, vaya que era sobreprotector–¡Ah! Invita a Yakov también.
–Claro, tambien invitaré a Phichit-kun y a Celestino.
–¿Invitaremos a JJ?
–Bueno, no sé, es que... ehh ¿en verdad quieres invitar a ese tipo egocéntrico?– a Yuuri no le simpatizaba mucho el canadiense.
–Sé que no te agrada mucho, pero es uno de nosotros después de todo–
–Está bien, aunque sigue sin agradarme la idea–
Lista de invitados:
Señor y señora Katsuki.
Mari Katsuki
Señor y señora Nikiforov
Familia Nishigōri
Christopher Giacometti.
Yuri Plisetski.
Otabek Altin
Phichit Chulanot
Jean Jacques Leroy
Sara Crispino
Michele Crispino
Emil Nekola
Mila Babicheva
Leo de la iglesia.
Guang Hong Ji
Seung Gil Lee
Yakov
Celestino
Georgi Popovich
Kenjirō Minami
Etc..
Un mes después llegó la fecha de tan esperada fiesta, ninguno de los invitados sabía realmente cual era el motivo por el cual se realizaba la misma, así que Chris se acercó a Victor para averiguarlo.
–Hey! Víctor.
–Hola, Chris.–saludó con una sonrisa.
–Y.. dime, Victor ¿que nos reúne aquí hoy?
–Oh, ya verás.–fue su única respuesta sobre el tema.
Cuando todos estuvieron sentados en sus respectivas mesas el matrimonio subió a la tarima. Yuuri tomó el micrófono y comenzó.
–Ehh ah, bueno, imagino que todos se preguntan por qué están aquí ¿cierto? ah mmm.–Yuuri estaba muy nervioso, todos lo miraban impacientes así que Victor decidió actuar al respecto.
–Los reunimos aquí para darles una de las mejores noticias que ha recibido nuestro matrimonio, realmente les agradezco a todos su presencia en este momento tan importante en nuestras vidas.–sonrió a su esposo y finalmente lo soltó–Estamos en la espera de nuestro primer hijo.–inmediatamente se escucharon aplausos y felicitaciones por todo el salón, la madre de Yuuri casi muere de la felicidad al saber que por fin sería abuela.
Por otro lado el japonés estaba sonrojado hasta las orejas.
Victor miró a su alrededor y sintió que por un instante absolutamente todo estaba perfecto, aunque sabía que los embarazos en hombres eran muy peligrosos, aunque sabía que tener dos padres homosexuales era mal visto, aunque sus amigos se estuvieran pasando de copas...
Hicieron un brindis por la pareja y su bebé, por un matrimonio próspero y un amor eterno.
Al finalizar la fiesta regresaron a su hogar, se retiraron los zapatos y se dirigieron a la habitación que compartían.
–¿Te he dicho alguna vez lo sexy que te vez en pijama?–dijo acercandose peligrosamente a Yuuri, este solo se sonrojó y acercó sus labios al oido de Victor.
–Muéstrame tu Eros una vez más.–el mayor sonrió con picardía.
–No, cerdito, es peligroso–besó su frente con delicadeza.
Ambos se miraron a los ojos, eran tan perfectos el uno para el otro, como el mar lo es para la arena, como el cielo lo es para las nubes.
El irritante sonido del timbre interrumpió el momento olímpicamente, Victor se dirigió a la puerta con cara de pocos amigos y la abrió cautelosamente, eran altas horas de la madrugada, por lo que debería tener sumo cuidado; su expresión facial cambió al ver a cierto rubio.
–¿Yuri?, ¿Qué haces aquí a estas horas?
–Uhm hola, yo...–este se rascó la cabeza con nerviosmo–Necesito hablar con el katsudon.
–Claro, adelante.–dijo invitándolo a pasar.–¿Quieres un té o algo?
–No gracias, yo solo... necesito hablar con Yuuri, bueno, más bien, con ambos, sobre algo importante.
Unos momentos después el chico estaba sentado frente al matrimonio, se notaba un fuerte nerviosismo en su rostro.
–Tengo algo importante que decirles...–Yuri suspiró e intentó calmarse.
–¿Que sucede?–preguntaron al unísono.
Este levantó la mirada y tensó su semblante.
–Y-yo...
–Puedes contarnos lo que sea, Yuri.
–Yo ehh, yo.. –jugaba con sus dedos.–Lo que pasa es que... mi padre me echó de casa...–dijo con un tono lúgubre.
–¿¡Qué!?–exclamó Yuuri.
–¿¡Qué estás sordo!? ¡Cerdo!
–Relajate, dinos por qué te echó de casa, debe haber una razón ¿no?
–Bueno, si, es que... yo, yo estoy.. Estoy e-embarazado.–la voz del rubio se rompió al final de la frase y bajó la cabeza, sentía vergüenza, se sentía como un idiota.
Los mayores guardaron silencio un momento, no sabían exactamente como reaccionar al respecto; el chico que consideraban su hijo desde que tenía 15 años les estaba diciendo que iba a tener un bebé, que su inocencia se había ido a la mierda.
–Fue ese idiota kazajo ¿cierto?–Victor comenzaba a enfurecerse.–Juro que usaré su cabeza para afilar mis patines.
–¡Victor, cálmate!
–¡No le hagas daño! por favor...
–¿Como quieres que me calme? ese idiota embarazó a nuestro chico.
–¡Basta!, debemos ayudarlo, Victor, no lo empeores.
–Por favor... no le hagas nada.–le suplicó con la mirada, llegando a parecer un tierno gatito.
–Yo... bueno–suspiró–¿Cuando sucedió?
–Hace casi dos semanas, estabamos solos en su apartamento, yo.. realmente no sé como acabamos así.
–¿Él te obligó?
–Claro que no ¡Beka nunca haría eso!
–¿Y que piensan hacer ahora?
–Bueno..–finalmente estalló en llanto, Victor y Yuuri se miraron a la vez y fueron a darle un cálido abrazo al rubio.
–Todo estará bien, todo estará bien...–dijeron sin estar completamente seguros de que así sería..
Nota de la autora:
Si llegaron aquí y son lo suficientemente inteligentes para deducir lo que hago, se han ganado un premio nobel.
Este fanfic será como abrir una caja de sorpresas en cada capítulo, espero que lo disfruten.
Yurio perdoname por hacerte una luchona 😭😂
Bye~
