Peony ; hs (Español)

05

Estaba frío y deprimente a fuera – sombrío también. Aunque a Peony le gustaba la lluvia a Harry no. El amor de ella por la lluvia era excesivo; justo igual que el amor de Harry por Ludwig Van Beethoven. Peony se dio cuenta de que él estaba tarareando una de las canciones del conocido pianista, moonlight sonata. Aunque él la tarareaba silenciosamente una pequeña sonrisa creció en la cara de la chica.

Si no fuera por la lluvia y la iluminación, Harry hubiera tenido que dejarla en su casa sola (Su papá tenía que trabajar hasta tarde esa noche). Mientras veía a través de la ventana del cuarto de Peony la lluvia caer violentamente, él dijo "Tal vez debería quedarme hasta que Todd llegue a casa. La electricidad se puede ir." Honestamente, ella no estaba asustada de la oscuridad ni tampoco de estar sola pero como quiera no dijo nada más que asentir con la cabeza estando de acuerdo.

La apariencia de Harry fue lo que hizo que una sonrisa real apareciera en la cara de ella. Ella disfrutaba su compañía, pero Peony amaba los efectos que él tenía sobre ella. Ella amaba el sentir la punta de sus dedos sobre su piel haciendo que esta se queme bajo su tacto. Ella amaba como su voz hacía que ella se sonrojara violentamente. Ella amaba cuando sus ojos la miraban intensamente. Ella amaba como él la hacía sentir, por fuera y por dentro. Pero de alguna manera ella lograba mantener todos pensamientos dentro de ella.

"Estoy aburrido" – Susurró Harry, descansando su cabeza en la palma de su mano mientras su codo descansaba en su pierna; Sus hermosos, vaya que muy hermosos ojos miraban para a fuera a través de la ventana. Los ojos color miel de Peony dejaron de ver su libro de historia para mirar el cuerpo de Harry. Sus ojos continuaban viendo hacía la ventana. Peony deseaba que él volteara y la viera con esos hermosos ojos verdes.

"Bien, entonces..." Peony dijo suavemente, dejando su tarea de historia en su libro antes de cerrarlo, dejándolo a un lado de su cama. Ella levantó su cuerpo para sentarse en su cama, Harry se sentó en la misma posición, pero ahora la estaba viendo. Ella juró haber perdido su respiración mientras él la observaba de cerca. "¿Qué quieres hacer entonces?" Peony dijo.

Ella podía escuchar su propio corazón latir fuertemente y ella lo sintió, otra vez. Ella sintió el nerviosismo que sintió la primera vez que se vieron. Ella odiaba sentirse nerviosa, especialmente este tipo de nervios, pero cuando estaba cerca de Harry, lo amaba.

"Quiero jugar un juego". Las manos de él de juntaron. Sus dientes atraparon su labio inferior. Las luces en el cuarto de Peony lo hacían ver joven e inclusive más hermoso de lo que ya era. Los dedos de Peony empezaron a jugar nerviosamente entre ellos mismos.

"¿Qué tipo de juego?" La voz de ella salía temblorosa debido a sus nervios, pero aun así era entendible. Sus uñas se empezaron a enterrar en las palmas de sus manos. Harry se paró de la silla del escritorio que estaba a un lado de la ventana. Lentamente, él se sentó en la cama.

"Cualquier juego, amor" Su tono de voz era bajo. Ella nunca había escuchado la voz de él tan profunda antes, y eso hizo que se le hiciera la piel de gallina. Casi se ahogaba con su propia saliva tratando de pasar el nudo presente en su garganta junto con sus nervios. No podía respirar, otra vez. La mano de él se acercó suavemente poniendo su cabello rubio detrás de su oreja.

"Déjame contarte un pequeño secreto sobre mí." Harry comenzó a decir, mientras mantenía su mano en el cabello de ella. Su mano ahuecaba casi todo ese lado de su cabeza. "Yo disfruto jugar juegos."

"¿Qué tipo de juegos? ¿Ajedrez? ¿Monopoly?" La voz de ella salió en un susurró. Harry miró a su regazo antes de volver a verla con una pequeña sonrisa engreída. El familiar zumbido se hizo presente en los oídos de ella; sus ojos comenzaron a cerrase.

"No, bebé. Yo te enseñaré." Ella sabía que en ese momento sus mejillas ya estaban ardiendo y de color rojizo, pero no le importó y mantuvo sus ojos cerrados. "Confías en mí, ¿no?"

"No lo sé, apenas nos conocimos un par de semanas atrás." Peony dijo sinceramente. Sus ojos estaban cerrados todavía. Harry se rio entre dientes suavemente.

"No ese tipo de confianza, mi flor. Me refiero a confiar en que no te voy a dañar." Ella ni se había dado cuenta de lo cerca que estaban sus caras hasta que abrió sus ojos. Ella sintió la respiración de Harry chocando con su cara; su respiración era cálida y olía como a menta y cigarro, pero mayormente a cigarro.

"Sí, confío en ti." Harry sonrío perezosamente, besando su frente suavemente. "¿Por qué?" Ella preguntó. Los labios de Harry permanecieron como estaban por unos momentos antes de que sus labios rosaran los de ella. Una vez más, Peony se sentía caliente, por todos lados.

"Es por esto." Y los labios de él tocaron los de ella.

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Aquí tienen, el regreso el Peony, ahvdd. Espero que les guste y ya actualizaré más seguido, tengan lindan noche <3.

Recuerden que la historia es original de diagnosis.

XOXO, Monse.