Vientre Alquilado ☆LS⭐

Capítulo XI

#Especial500seguidores

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~*~

Harry bajó las escaleras rápidamente, Mirna lo seguía por la espalda. Ambos entraron en la cocina y comenzaron a tomar cosas para desayunar.

Harry tenía una camisa blanca de botones hasta el cuello y pantalón negro de mezclilla. Mientras ella llevaba un ligero vestido amarillo y unas bonitas sandalias.

"¿Tienes mucho trabajo hoy?" Preguntó la chica mientras ponía un poco de café en su termo.

"Algunas citas, tal vez salga temprano. ¿Porqué?" Ella negó restando importancia al asunto.

"Solo quería ser un poco curiosa en cuanto a tu trabajo." Dijo y Harry alzó una ceja.

"Nunca lo has sido, a mi no me importa el tuyo así que no tienes que molestarte en preguntar." Contestó secamente y ella tomó un gran respiro tratando de mantenerse centrada.

"No tienes porque ser tan duro conmigo, cariño." Dijo acomodando su cabello detrás de sus orejas.

Harry tomó su vaso de jugo y comenzó a caminar fuera de la cocina.

"Simplemente soy directo mi amor." Le sonrió hipócritamente y salió de su vista.

Mirna negó dejando caer sus hombros, tomó su termo y las galletas para seguir el camino de Harry hacia el comedor.

"Si estás molesto por mi manera de anunciarte el embarazo, lo siento, ¿esta bien?" Harry estaba sentado en un extremo de la mesa, levantó su mirada pero solo siguió masticando su pedazo de pan. "No se puede contigo." Se recargó en el respaldo de una de las sillas y lo miró.

"No estoy de humor para una de tus escenitas Mirna." Ella alzó las manos quitando toda culpa de su ser.

"Quise ser amable contigo, precisamente para no alterarte los nervios. Pero veo que no funcionó." El castaño la ignoró y simplemente siguió desayunando.
"Bien." Dijo rendida ante la actitud de su esposo.

"Louis llega hoy." Informó Harry mientras bebía de su vaso de jugo. Mirna lo miró y frunció el ceño.

"¿Me diriges la palabra sólo para hablarme de Louis?" Preguntó y Harry frunció los labios mientras se encogía de hombros.

"Creí que te interesaba saber cuando regresa el chico que carga a nuestro hijo." Habló entre dientes.

"También me interesa saber cómo es que sabes que regresa hoy." Dijo y Harry la miró descaradamente.

"Me lo dijo ayer que lo llamé." La chica alzó las cejas y asintió remarcando la lengua en su mejilla.

"¿Lo llamas todos los días acaso?" Preguntó con cierto tono de molestia en su voz. Harry se encogió de hombros mientras mordía su labio superior. Se levantó de la mesa y regresó a la cocina. "Responde a mi pregunta." Gritó y Harry regresó al lugar.