Cuando desperté estaba tirado en un bosque, tenía la sensación de que era un lugar conocido aunque no entendía exactamente porque, me quede tirado unos segundos... Sintiendo él suelo una tierra blanda cubierta casi perfectamente con una capa de hojarasca de los árboles marchitándose, era un bosque tupido con árboles gigantes que si tuvieran todas sus hojas fácilmente podrían cubrir él cielo, ese cielo... Era del negro más oscuro que jamás hubiera visto, era un negro tan profundo que parecía atraparte, el clima era demasiado frío podía sentir como se entumecía mi cuerpo, como él frío dificultaba mi movilidad. Había una luna llena al fondo de ese oscuro cielo, era una luna gigantesca y perfectamente redonda, una luna a un cálido pero difuminado tono rojizo, era la única fuente de luz en toda la distancia que mis ojos permitían ver, solo que la luz no era blanca como naturalmente la conocemos, era una luna que emitía una luz oscura, esta luz me permitía saber donde estaba cada objeto aunque no pudiera verlo de la manera en que estaba acostumbrado.
Me pongo de pie y cuando levante la mirada estaba viéndome a mi mismo de frente, era como si hubiera un espejo y pudiera ver mi reflejo.
Levantó la quijada y miró hacia la luna, empezó a cambiar yo podía ver como se convertía.
Podía ver como salía espuma de su boca, como su cabeza tomaba la forma de una cabeza como de perro solo que no tenía cabello, su piel escamosa y seca, asimilando una rana, y unos ojos grandes e intimidantes como si pertenecieran a un gato inmenso, tenia una especie de garras y bufaba.
Corrí para huir de él, se escuchaba él crugir de las hojas escuchaba de manera estrepitosa su bufar.Salí hacia una especie de cueva donde intente perderlo, luego a una parte más tupida del bosque y finalmente a un llano, eso jamás me perdía de vista, era como si pudiera saber que pensaba, como si ya me conociera mejor que nadie.
Finalmente me tropecé torpemente en él llano y me dió una desgarradora mordida en mi costado derecho.
Estaba muriendo, sentía como me despedazaba lenta y dolorosamente. La muerte más sádica que había visto.Salió él sol, un sol dorado que quemaba con tan solo estar expuesto a él, fue entonces que le bestia me regurgito y me vomitó, renací del vómito y la bestia fue consumida por él sol.
Fue entonces que me di cuenta que en realidad la bestia no me había matado, en realidad estaba en él infierno, en realidad había muerto antes.

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Revelaciones
ParanormalEn realidad nadie puede definir quien esta cuerdo y quien loco porque la cordura es un pedazo de nuestro cerebro y la locura un pedazo de nuestra alma que luchan por existir él uno sin él otro.