En esta historia vas a acompañar a Will Sawt, un chico bien parecido de 12 años de edad. ¿Su obsesión? La chica de atrás, una chica que sale todas las tardes después del colegio a su ventana a ver el cielo. Pero ella nunca a visto a Will hasta que é...
Hoy es martes, si, martes y desde el sábado que vino Brooke a mi casa Mía no me a hablado. Mía sale de su ventana pero no me voltea a ver y cuando le gritó su nombre se adentra en su habitación. Estoy empezando a creer que Brooke le dijo algo a Mía ya que desde ese día ella no me habla. Mi querida Mía: te extraño, extraño tu sonrisa y tu mirada e incluso esa bonita letra que tienes.
Hoy me decidí a hablarle a Brooke para saber si le dijo algo a mi Mía. -¡Brooke! - le gritó ya que está al otro lado del pasillo. - Hola Will - me responde acercándose con pasó rápido a mi. - Te quería preguntar si le hablaste a mi vecina - le digo ya cuando está lo suficientemente cerca - Te voy a ser sincera, porque tú me gustas - me dice acercándose a mi. Esta amiga actúa como si tuviera 16 años. - Si, le hable, bueno digamos que le escribí en una hoja que te tiro - siento como me sube toda la ira. - Y que le escribiste exactamente - preguntó con los dientes apretados. - Le dije que eras mi novio y que ya no te molestará - responde soltando una risita. - Idiota - masculló, para luego darme vuelta e ignorar sus gritos llamándome. Que cree esa loca no puede solo venir y decirle a mi Mía que soy su novio, ya me recordé porque no tengo amigas.
Hoy en la tarde cuando Mía sale de su ventana le tiro la hoja calculando si va a entrar y como ya comprobé tengo un excelente pulso justamente entra en su ventana. No espero una respuesta solo me adentro a mi habitación con la esperanza de que Mía me entienda.
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