The Girl [h.s]

[3]

El dolor que sentía Harry no podía ser peor. Se sentía roto otra vez, como lo hizo en el hospital hace cinco años. Se sentía rechazado y solo. Su madre lo consoló, diciendo que estaba bien y que los recuerdos eran demasiados sobre ella. Él estuvo de acuerdo, tal vez ella tenía demasiada información dada sobre sí misma.

Pero el hecho de que ella recordara, cuando él la llamaba "nena" puso una sonrisa en su cara. Tal vez si actuara como lo hacia antes, tal vez ella recuerde. Recuerde cómo lo amaba y cuidaba. De solo pensarlo, se emocionaba por volver a verla. Cogió su teléfono y llamó a la persona más cercana que tenía, además de Seraphina; Louis.

"¿Hola?" Contestó Louis.

"Oye, ¿podrías darme su número?" Preguntó Harry, hubo un pequeño silencio entre los dos.

"¿Estás seguro?" Responde.

"Estoy seguro, tengo un plan."

"Bien." Louis suspira mientras cuelgan. Harry inmediatamente recibe un mensaje y le da las gracias. Lo añade a sus contactos y decide enviarle un mensaje de texto. Aunque es tarde, quería verla mañana por la mañana.

*Hola amor. Probablemente no sabes quién soy, espero no estar asustándote por encontrar tu número. Un amigo me lo dio. ¿Te importaría encontrarnos para un café mañana por la mañana en la pequeña tienda de la esquina? Gracias, nos vemos. x *

Harry se quedó allí, contemplando si debía enviarlo o no. Rápidamente lo borró y le envió un simple texto diciéndole que lo encontrara en la cafetería. Si él quiere que ella lo recuerde, tiene que dar pequeños pasos para alcanzarla. Y esos pasos de bebé son lo que él necesita, para recuperarla.

Seraphina había llegado a casa, su energía era drenada por lo que paso. Entró en su acogedor dormitorio, luces colgadas en las paredes. Su cama era un desastre, ya que su plan para el día era conseguir un libro y regresar a su cálida cama.

Parece que no todo sale como lo planeas.

Su cabeza dolía, su mente estaba borrosa, y tenía los ojos hinchados. Los recuerdos la golpearon con fuerza. Lo suficientemente duro para romper sus paredes, porque hay alguien por ahí que la ama. Incluso después de todos estos años, ella ha sido amada por alguien. Harry.

Su teléfono vibró al llegar un mensaje, el cual abrió al instante. Al instante, lamentó porque todavía tenía agendado aquel número en sus contactos. Se trata de su antiguo teléfono,el teléfono que tiene desde hace años. Y ella nunca entró en el contacto de Harry.

Toda su vida gira alrededor de él, otra vez. Cuando la llamó "nena", ella recordó. Recordó pequeños recuerdos, no demasiado claros. Y la golpeó lo suficiente como para salir corriendo y llorar. Probablemente se parecía a un bebé, llorando así.

Pero los sentimientos le duelen. Y no puedes saber cuando van a aparecer o desaparecer. Colocó el teléfono en la mesita de noche y se dejó caer sobre la suave cama. Ella puso su cara en sus manos. Todo parecía sencillo antes.

Todos los días leía libros tranquilamente, nada le molestaba. Pero ahora, lo único que la molestaba era Harry. Él estaba constantemente en su mente, a pesar de que trataba de empujar sus pensamientos lejos.

Mientras ambos, Harry y Seraphina, estaban recostados en sus camas. Ambos pensaban en el otro, ¿cómo fue el que el destino los volvió a juntar? ¿Es porque están destinados a estar juntos?

Bueno, eso es lo que Harry pensaba. Desde antes, hace cinco años, eran la mejor pareja. Todos su amigos los adoraban. Estaban celosos de lo perfectos que eran el uno para el otro.

Pero no todo dura para siempre.

Ambos estaban nerviosos, nerviosos de lo que vendría. ¿Se convertirán en pareja una vez más? Incluso después de todos estos años, ¿Harry todavía la quería?

Él sabe que lo hace, la ama hasta la luna ida y vuelta. Tal vez incluso hasta Plutón de ida y vuelta. Él quiere que ella sepa, que se preocupa por ella. No le importan los puntos y cicatrices que tiene en su cuerpo por el accidente.

No le importa que tenga el pelo desordenado o que no se maquille. La ama por lo que es; a sí misma. Está contento de que no haya cambiado demasiado, como su amor por los libros. Sonrió, recordando lo concentrada que estaba al leer.

Y eso le dio una idea. Así que salió rápidamente de la cama, y corrió hacia su escritorio. Abrió cajón tras cajón hasta encontrar lo que necesitaba.

Si le encanta leer, ¿por qué no escribir sobre el pasado? Cuando todo estaba perfecto. Mientras hacía clic para abrir su pluma, instantáneamente empezó a escribir memoria tras memoria. Porque ella merece saber. Ella puede saber lo que le deparara el futuro, pero ella no puede recordar su pasado. El baúl de los recuerdos la ayudará a encontrarse a sí misma. 

Ojalá.

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¡MIS AMORES! Espero que les guste este capitulo, es realmente hermoso. Esta es una historia corta, faltan dos capítulos más y acaba.