Shrek y tú.

¿Me fallaron las matemáticas?

Genial, otro día en la clase del schnauzer.

Como siempre, empezamos a hacer ejercicios con el balón.
No era mala en los deportes, pero me gustaba más tomar un buen libro y ponerme a leer.

-Muy bien chicas, vamos a hacer un partido de fútbol.

Ugh, fútbol, soy pésima para fútbol, quedaré en ridículo frente a shrek. Estaba sola así que nadie me escuchó decir eso.

-Vamos a jugar________-me llamó una de mis amigas.

-Si________, juguemos- me gritó la otra.

-Está bien- dije, me levanté y corrí en su dirección.

Genial, iba pensando, están justo al frente de shrek, ahora él me verá.

El partido empezó, yo no podía apartar la mirada de él hasta que el balón llegó a mi.
Iba muy bien hasta que 2 niñas vinieron hacia mí y al querer escapar mi pie se dobló provocándome un esguince.

Caí al suelo, no podía soportar el dolor, grité y me puse a llorar.
Una de mis amigas llamó a una de las maestras (la única que estaba cerca) y ella dijo que me llevaran a la coordinación.

Sxhnauzer, me dijo que me apoyara con el pie bueno pero no podía, el dolor era terrible.

En medio de la multitud, pude ver cómo Shrek se acercaba a mi. Mis lágrimas se fueron pero el dolor seguía.

Me levantó con sus grandes manoplas y me llevó cargando hasta la coordinación.

En el transcurso solo pensaba, oh santos macarrones con queso, Shrek el ogro de mis sueños esta cargándome.

En ese momento me sentí como la princesa más hermosa de su pantano.

Llegamos, el me depósito suavemente en una de las sillas y salió volando por la ventana.

Mis amigas llegaron rápidamente...