Trina no habla en todo el viaje de vuelta. Llegamos a su casa y nos encerramos en su habitación, parece preocupada y me empieza a entrar miedo, ¿Qué cojones ha pasado?
-Esto... no es... fácil de... de...cir... -Empieza hablando Trina, se le corta la voz.
+Dilo ya, no pasa nada. -Necesito saberlo ya.
-Tu ibas muy mal, y... bueno... haber... subiste con Jack a una habitación, porqué a él le tocó ese reto, y bueno... pues eso... se aprovechó de ti...
+Me estás diciendo que me a violado...
-En otras palabras si...
Empiezo a notar como mi cuerpo se tensa, como mis ojos se empañan de lágrimas y como no puedo ni hablar. Así que de esto estaban hablando antes, esto es por lo que Jack me miraba de esa forma... No puede ser cierto, me han violado y me acaban de robar la virginidad de la forma más vulgar posible. No puede ser.
Trina nota que me quedo callada y mirando a la nada, me toca el brazo y reacciono, parece muy afectada, muy asustada y sobretodo se nota que se siente culpable. Me abraza con muchísima fuerza y las dos lloramos, me pide disculpas una y otra vez. No puedo parar de llorar, esto no puede haber pasado.
No me apetece nada de nada verlo el lunes en clase, que me restriegue por la cara lo que ha hecho. Empiezo a preguntarme quién lo sabrá, si se reirán de mi y si me tacharán de fácil y de fresca.
Necesito estar completamente sola, pensar en lo sucedido e intentar recordar todo lo sucedido anoche.
Me despido de Trina y voy andando hacia mí casa.
Por el camino me empiezo a sentir sucia, empiezo a sentir que las piernas me pesan y que a la vez me tiemblan. Empiezo a tener pequeñas dosis de memoria y empiezo a recordar algunas partes. Como me besaba y como estaba encima de mi. Se me humedecen los ojos. Sigo andando, ando tan rápido como me permiten las piernas hasta llegar a casa.
Entro, mi madre se percata de que me pasa algo, pero no ahora no tengo ganas de hablar así que decido ir directamente a ducharme.
Me encierro en el baño, se que mi madre está fuera escuchando. Me desnudo y me miró al espejo, realmente me siento muy muy sucia. Me meto dentro de la ducha y dejó que el agua caiga sobre mis hombros, no dejo de pensar en lo sucedido.
Por lo menos me paso una hora debajo de el agua, salgo y tengo todos los dedos arrugados. Me seco y me dirijo a mi habitación. Allí me espera mi madre.
-Ainhoa que ha pasado... -Me pregunta
Empiezo a llorar desconsoladamente y me abraza con fuerza.
Cuando me consigo relajar, le cuento poco a poco y medio llorando lo sucedido la noche anterior y ella se le empiezan a sentar los músculos y a taparse la boca con la mano. Realmente está muy enfadada.
-Dime su nombre -dice con una voz muy seria
+Se llama Jack, mamá. Es uno nuevo que ha llegado.
-Cariño... déjame contarte una cosa.
+Me estás asustando un montón mamá.
-Lo se cariño... Jack, es el hijo de mi mejor amiga, Angela... no me creía que era verdad cuando me dijo que su hijo se venía con su padre aquí. Pero acabo de ver que es verdad.
Me quedo completamente de piedra, no puede ser el, ni de broma vamos, no puede ser ese con el que me veía en Navidad cuando íbamos a Inglaterra, no puede ser, ni de broma.
-Cariño... lo siento de verdad. Voy a llamar a Angela.
+No lo hagas, no quiero problemas. Déjalo estar. Todo olvidado, como sino hubiera pasado de verdad.
-Si necesitas algo, dímelo.
+De acuerdo mamá.
Se va de mi habitación, no se puede olvidar algo así, no puede ser cierto de verdad, no puede serlo. Me tumbo en la cama e intento dormir.
Me resulta bastante fácil dormirme, en sueños recuerdo trozos de la noche anterior y al recordar cómo se corrió dentro de mí, me despierto sobresaltada y sudando. Llamo a Trina y le cuento todo lo que he recordado hasta ahora, se queda completamente pasmada y me dice que en 15 minutos está delante de mi casa.
Así lo hace, suena el timbre, entra en mi casa y nos subimos a la habitación, como por llamada se lo he contado resumido, se lo cuento con detalle, incluyendo lo de la corrida y lo que mi madre me ha contado sobre él.
Cuando acabo de contárselo todo, ya es de noche, Trina me dice que mañana hablamos que tiene que irse ya de ya. Asiento y la acompaño a la puerta. Allí me da un abrazo tan fuerte que casi me deja sin respiración y se va.
Cuando estoy cerrando noto como una sombra se mueve entre los árboles, no le doy importancia y me voy a mi habitación a dormir. No me apetece cenar así que me pongo los cascos y me duermo.

ESTÁS LEYENDO
Perdida por él
Teen FictionDigamos que me ha hecho daño... Tengo 16 años y he sido víctima de cupido, pero se ha equivocado al emparejar. Me llamo Ainoha y esta es mi historia