Una rara sensación se instaló en mi estómago, me sentía nerviosa y a la vez preocupada. Eran casi las doce de la noche y James aún no llegaba, sé que era estúpido pero estaba preocupada por el, me levanté de la cama rápidamente y me dirigí a prepararme un café. Además de la preocupación también estaba nerviosa por lo que había ocurrido en la tarde. Y como si lo hubiese llamado con el pensamiento, el apareció.
—Hola— murmuró y se sentó en el sofá.
—Hola— sonreí—¿Quieres café o algo?
—Me encantaría—dijo y yo le tendí una taza—Gracias, ¿Cómo te fue con Ashley?
— Bien—sonreí y me senté junto a el— ¿Y tu que hiciste? ¿Cómo te fue?
—Yo—carraspeó con la garganta—Estuve haciendo unas diligencias y se me hizo tarde.
—¿Puedo preguntarte algo y prometes no enojarte?— el asintió—Cuando esas chicas fueron a la casa, el día que me golpearon, ellas dijeron que tu vendías mujeres, ¿eso estabas haciendo?
—No— respondió rápidamente— Eso lo hice un par de veces, y no es que yo las vendiera, era un intermediario.
—¿De la persona que me tiene secuestrada?
—No, el sería incapaz de hacer eso.
—Pero me tiene secuestrada—murmuré— En fin, no vendes mujeres.
—Exacto, no lo hago— cerró sus ojos.
—¿Te acostaste con ellas?
—Sí, pero fue hace mucho- se encogió de hombros.
No sabía que decir, ni mucho menos que hacer, en si, no entendía el porqué había hecho esa estúpida pregunta. A mi no me importa sí se acuesta con ellas, o sí. Quisiera golpearme por no saber cerrar la boca, ya había pasado por momentos así de incómodos.
—¿Recuerdas nuestros planes de mañana?— dijo después de unos minutos de silencio.
—No me dijiste cuales eran.
—Es por que son sorpresa tonta.
—Si los recuerdo.— reí
—Entonces nos vemos mañana—besó mi frente—Buenas noches.
—Buenas noches—dije sonriendo tontamente.
(...)
Mi mirada seguía perdida en la carretera, nunca había ido muy lejos, y una parte de mi estaba preocupada por saber a donde me llevaba James. La noche anterior había sido un caos, yo realmente no había podido dormir, me estaba dejando confundir demasiado, en un momento James se comportaba como un idiota pero luego era amable conmigo y eso me molestaba, prefería que se comportase siempre de una sola manera. Una parte de mi estaba segura que si empezaba a sentir algo de atracción hacía el era por el maldito encierro al que estaba sometida, por que probablemente si yo estuviese teniendo una vida normal en la ultima persona que me fijaría sería en el.
—¿Estas bien?
—Si, ¿porqué?
—No sé es que generalmente hablas mucho.
—Creí que te molestaba eso.
—En parte, pero me molesta más que no hables.
—Entonces hablaré—sonreí—James, ¿Tu crees que algún día me liberaran?
—No lo sé Dani, yo soy un simple guardaespaldas.
—Me alegra no ser como los secuestrados que viven tras una reja—suspiró—pero de verdad necesito recuperar mi vida, mi familia.
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SECUESTRADA
Romance¿Es posible enamorarse de quien te ha tenido apartada de todo? ¿Es posible enamorarse de quien básicamente arruino tu vida? "¿Cómo podría enamorarme de alguien como tú? Eres tan solo una niña, y que me hayas confesado tus estúpidos sentimientos sol...