COMO PASO??!(yaoi)

capitulo 30

Narra Max

Salino lo más rápido que pudimos hacia el hospital. Henry seguía perdido, en shock y aunque yo solo quería echarme en mi cama y llorar o simplemente pensar que era solo una simple pesadilla, lo cual no sucedería, tenía que armarme de valor y ser fuerte, más que nada por mi familia, por los seres que amo.

Luego de tomar un taxi, pagar y salir lo más rápido que pudimos a urgencia, preguntamos, con escases de aire, al médico que nos atendió , como se encontraban nuestros padres.

El medico al saber que éramos los familiares frunció levemente el ceño y con cierta paciencia, la cual me sacaba de quicio respondió.

-La señora esta fuera de peligro, pero...con respecto al señor, está en estado crítico.-tales palabras me cayeron como plomo, el solo hecho de pensar en perder a mi padre me hacía ganas de vomitar...me quede en completo shock y sin poder evitarlo empecé a llorar silenciosamente, sintiendo como mis lágrimas mojaban mis mejillas sin importarme.- ere lo que pueda por salvarlo.- dicho esto se retiró dejándonos solos.

-Max...-escuche que susurraba Henry y poso una mano en mi hombro la cual aparte de inmediato y lo mire con una expresión que ni yo sabía que podía poner. Una mescla de angustia, miedo, rabia se mesclaban en mi interior sin poderlas contener. Vi como este me miraba sorprendido y algo asustado, sin darle tiempo a que reaccionara me aleje de él.

No era que estaba enojado porque su madre está a salvo y el mío no, aun... es solo que es algo complicado, algo, que por más preparado que estuviese, el miedo me consumía... luego de estar caminando por el centro y entrar en un parque de por ahí, me senté en una banca que solo era iluminada por una escasa luz.

Sin poderlo evitar empecé a llorar, a desahogarme...no quiero perder a mi padre. Llore con más fuerza sin importarme lo que la gente diría al pasar... total era de noche y no había mucha de suerte.

Llore y llore. La angustia junto con la culpa me invadió haciendo que me sienta más miserable aun. Henry no merecía que lo tratase así, él no tenía la culpa...el corazón se me contrajo y el aire no llegaba a mi pulmones, y las convulsiones del llanto no ayudaban en lo absoluto.

Me saque las gafas para limpiarme los ojos, ya enrojecidos, y al ponérmelas nuevamente vi que alguien estaba parado frente mío.

Eleve mi cabeza lentamente, encontrándome la mirada de Luke, quien me miraba con cierta pena y preocupación.

-Max... ¿estás bien?-no si solo lloro por gusto, pensé con sarcasmo.

-vete, no quiero tu lastima.- dije parándome para largarme de aquel lugar sintiéndome invadido. Pero su mano me sostuvo con fuerza por la muñeca evitando que siga avanzando y que gire la cabeza bruscamente.

-per... que te pasa- dije enfadado y tratando de liberarme sin lograrlo, haciendo que apreté más su mano en mi muñeca y produciéndome dolor.-déjame.

-no, no es normal que llores, menos acá y de esa manera.

-claro que no lo es!!!-dije más enojado aun.-y que piensas hacer al respecto, sacaras la solución de un sombrero mágico o qué??-dije indignado, volviendo a ver borroso y a llorar sin poderlo evitar.

-no...-dijo apartando su cara, mirando hacia otro lado-p...pero puedo ayudar en lo que sea!-volvió a mirarme fijo y con decisión.

-y como si ni siquiera sabes lo que me pasa- dije largando un nuevo sollozo.

-y por eso quiero saber-dijo Luke irritado, apretando más aun mi muñeca haciendo que haga una mueca de dolor.

-y que pasa si no quiero decirte...si aún no confió en ti!-dije llorando, ya no podía ver con claridad pero sentí como Luke me liberaba de su agarre. Inconscientemente tome mi muñeca adolorida para calmar un poco el dolor.

-...solo intentaba remediar lo sucedido- dijo en un susurro desviando nuevamente la vista.

Una punzada de arrepentimiento me invadió nuevamente. Él tampoco era el culpable de lo que me sucedía, nadie lo era....

-lo siento...-susurre desviando la vista, sintiendo como sus ojos se posaban en mí. Las lágrimas volvieron a acudir a mí, empapando mis gafas, dificultando el poder ver.- no...no p-puedo más...-solté como pude, mis pierna de repente perdieron la fuerza para sostenerme y caí al suelo de rodillas sin poder evitarlo- n-no puedo más...mi vida apesta...s-soy un idiota, no sé ni para que existo...t-todo me va mal-solté entre sollozos. Luke me miraba atento, sorprendido. No sé cuándo, pero se había agachado a mi lado apoyando sus manos en mi espalda para luego apoyarme en su pecho haciendo que llore con más intensidad.

Luego de un rato, en el cual me desagüe, le conté todo lo que me paso. De lo de Marck hasta lo de mi padre. Y me escuchó atentamente mientras me decía palabras de aliento.

Luego de tanto insistir me llevo a de vuelta al hospital, con la excusa de que no podía ir solo.

Narra Henry

Estaba tan preocupado. Desde que Max se había ido, y de ese modo, no dejaba de dar vueltas en sí mismo. Con el corazón en la garganta y el alma por el piso por lo que estaba sucediendo. De cierto modo entendía por qué había actuado así, debía ser muy doloroso, pero él no era el culpable. Ya sabía que su dolor no tenía comparación, después de todo yo nunca tuve un padre digno y mi madre estaba fuera de peligro mientras él podía perder lo único que le quedaba de su familia de sangre. Pero... apretó sus manos dejando que los nudillos se pusieran blancos y mordió su labio con fuerza como si con eso pudiera solucionar algo.

Luego de estar horas caminando sin descanso, dando vuelta como un perro perdido, decidió sentarse. Sin embargo sus nervios no cesaron y su pierna temblaba sin poder controlarla.

Al cabo de uno segundos, el medico volvió a aparecer y Henry se levantó velozmente.

-q-que pasa-dije rápidamente, preocupado por lo que podría decir.

-el señor Martin, ¿verdad? , está fuera de peligro, en una sala en reposo al igual que la señora que lo acompañaba, están estables, pero el señor Martin estará en periodo de observación, por las dudas-dijo el médico con tranquilidad, Henry asintió con fuerza, casi desesperado.

-y...y se puede visitar?

-claro, la señora María esta consiente...pero el señor se encuentra en estado inocente.

Henry solo asintió nuevamente y le pregunto el número de la habitación.

Vio como el medico desaparecía por los pasillos para darse la vuelta e ir a buscar la tal habitación. Pero se detuvo en seco al ver perplejo como Max estaba al lado del imbécil de Luke, demasiados pegados el uno del otro. Haciendo que Henry hierva de ira y se acercara velozmente a ellos, empujando a Luke con brusquedad y mirándolo con furia a amos.