Los Cocodrilos: La Rebelión de las Chicas

De fiesta

Fueron por todo el local hasta encontrar a uno de los dueños.
Al verle María se dio cuenta de que era uno de los hermanos de Alec y Ámbar, lo recordaba de la foto.
-¡María!¡Este es Edward,nuestro hermano mayor!-dijo Ámbar.
-Encantada-dijo María dándole la mano al hombre.
-Tu eres amiga de Ámbar y Alec¿no?-preguntó Edward.
-Soy amiga de Ámbar, pero no me consideraría amiga de Alec.
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-¿Y entonces por que tiene su brazo por tu hombro?
-Por que estamos saliendo-dijo Alec tranquilamente mientras agarraba dos bebidas de la fuente de una camarera y le daba uno de ellos a María.
Edward se empezó a reír mientras se apoyaba en la mujer que estaba a su lado,ella tenía una sonrisa burlona y retaba a María con la mirada.
-¿Qué te pasa,Lissa?¿Estas celosa?-preguntó Ámbar burlándose de la mujer al notar la mirada que le dirigía a María.
-No,pero pienso que vuestra amiguita es sólo una niñita buena intentando hacer un penoso intento de rebeldía al salir con un chico malo-dijo Lissa burlándose claramente de María.
-¡No te permito que insultes o te burles de mi novia solamente por que seas la mujer de mi hermano mayor!-dijo Alec haciendo callar a Lissa con una mirada amenazante.
-¡Más respeto,Alec!¡Lissa es mi mujer!-dijo Edward enfrentándose a su hermano.
-Y María es mi novia a sí que dile a la fulana que tienes por mujer que la deje en paz-dijo Alec retando a Edward.
María estaba nerviosa y fascinada,estaba nerviosa porque sabía que se podía iniciar una pelea enorme por culpa de lo que fuera que tenía esa mujer en su contra y fascinada porque por primera vez en todo el tiempo que llevaba saliendo con Alec veía a su novio en su medio natural,sabía que Alec se habia dedicado a las peleas ilegales desde pequeño y que tenía mucha destreza en el uso de navajas y otros objetos.
-Edward,déjale tranquilo. No quiero tener que llamar a Percy o a Jackson para que te lleven a urgencias-dijo Ámbar molesta con su hermano mayor.
-¡El que tendrá que ir a urgencias es él!-gritó Edward mientras se abalanzaba contra su hermano.
Alec se apartó y Edward se estrelló contra la barra del minibar de la sala VIP.
A pesar de que Edward era mas alto y más mayor Alec tenía mucha ventaja porque era más ágil y rápido,a parte tenía más experiencia en las peleas.
Los intentos de Edward de golpear a Alec eran inútiles pues él se apartaba sin el mínimo esfuerzo.
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-¡Ya basta!-gritó un hombre antes de tumbar a Edward de un puñetazo.
-¡Edward!-gritó Lissa corriendo al lado de su marido para asegurarse de que estaba bien.
-¿Qué tal,hermano?-preguntó Alec al hombre al tiempo que se saludaban.
-Muy bien,enano¿y tú?
-Bastante bien,Edward es un inútil cuando se trata de pelear-dijo Alec observando a su hermano mayor levantarse con ayuda de Lissa.
-Hermanito,necesito que me confirmes unos rumores-pidió el hombre.
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-¿Qué pasa,Percy?
-¿Es verdad eso de que tienes novia?
-¿Quieres conocerla?
-¡Claro que si!-dijo Percy entusiasmado.
Alec llevo a Percy a donde estaban María y Ámbar.
-Hola,chicas-dijo Alec dándole un abrazo a su hermana y un beso a su novia.
-¡Percy!-gritó Ámbar antes de abrazar a Percy con todas sus fuerzas.
-Pequeña necesito aire-dijo Percy tratando de respirar o de liberarse del abrazo de su hermana.
-Ámbar,suelta a Percy¿si?-dijo Alec antes de beberse de un trago la bebida que había "robado" antes de la fuente y que María le había sujetado mientras se peleaba con Edward.
-Vale-dijo Ámbar con un puchero mientras soltaba a Percy.
-¿Tu eres la novia de mi hermanito?-preguntó Percy señalando a María.
-Eso creo,me llamo María.
-Yo soy Percy,el segundo de sus hermanos mayores.
-Bueno,yo me voy a buscar a un chico para pasar el rato-dijo Ámbar yendo hacia una de las dos pistas de baile.
-Vosotros deberíais de ir también. No te hará daño un poquito de diversión,hermanito- dijo Percy mientras le pedía a la camarera un whisky.
-Eso íbamos a hacer-dijo Alec mientras guiaba a María hacia la pista de baile.
Cuando llegaron al medio de la pista empezaba a sonar La Bicicleta de Shakira y Carlos Vives.
Se pusieron a bailar y así siguieron toda la noche.