Alexandra, La Chica Suicida

Vacante 2/2

-Es buena- dijo July cruzada de brazos y animada -Creo que hablo por las tres al decir que encontramos a quien tanto buscábamos- ahora July parecía tan emocionada como si viera lo más maravilloso del mundo

Nos encontrábamos en las bancas cerca del vestuario, estaba algo lejos de la piscina donde Delilah aguardaba por nuestra respuesta y es que ya había hecho la prueba y tuvo un tiempo extraordinario.

-Si, es buena- dijo la señorita Díaz -pero tenemos que ver que tan buena es en equipo- ella nos dedico una pequeña sonrisa e indico con su pulgar la piscina -adelante vayan a hablar con ella- mire a July quién se levantó y se dirigió hasta el extremo donde Delilah se encontraba y hablo un poco con ella.

-Enseguida vuelvo- dijo la señorita Díaz

Estaba sola y veía como ambas chicas reían y hablaban, al parecer se llevarían muy bien, después de un rato me di cuenta de que July dijo algo que hizo que Delilah volteara a verme sorprendida, ella no desprendía sus ojos de mí.

Nuestras miradas se juntaron y así permanecimos, se sentía la tensión pero ninguna quería alejar la mirada, un leve sonrojo amenazaba mis mejillas y un pequeño escalofrío recorrió mi columna, Delilah al notarlo solo me dedico una sonrisa seguida de un sonrojo poco notorio.

"Ella estaba mirándome y se sonrojo" pensé al momento que ella alejo su mirar "¿está mal si creo que se ve linda?" Mire mis manos que se encontraban apoyadas en mis rodillas "¿Porque estás pensando eso Alex? Acabas de conocerla" deje salir un suspiro ante tal cosa y es que era cierto llevaba tan solo unas horas de conocerla y ya me había cautivado.

-¡A nadar Alex!- la señorita Díaz dió unos golpecitos en mi espalda haciendo que saliera de mí trance y que me asustara al mismo tiempo

-Gha!- intente ahogar el grito pero mi intento solo sirvió para que  July como Delilah dirigieran su vista a mi.

-¿Te asusté? Oh lo siento estrellita- se disculpó la mujer colocando una de sus manos sobre mi hombro más cercano a ella

-No se preocupe, estoy bien- dije intentando calmarme -Yo... Podría retirarme- dije con la mirada baja

-¿porque?- pregunto sin apartar su mano de mi hombro

-B-bueno supongo que ya ter-terminamos- ¡no! De nuevo deje salir el tartamudeo, vergüenza, si eso sentía en ese momento

-Cierto, la decisión ya fue tomada- sin decir más la señorita llamo a Delilah y a July, cuando estás se encontraban más cerca la mujer mayor dió un fuerte -¡Felicidades!- abrazo a Delilah -Estas dentro del equipo- dijo soltandola.

Delilah me miro y pregunto -¿De verdad?- yo solo asentí -¡Ah!- grito alegre y se acercó a mi, me tomo de las manos y con una gran sonrisa dijo -Gracias- la mire sorprendida y al hacer contacto con sus ojos me quedé atrapada en ellos, quería hablar y decirle "de nada" o "¿Que esperabas? Eres realmente buena" pero nada salía de mi boca, por un momento temí quedarme muda pero aleje ese pensamiento al sentir un cuerpo junto al mío y dos brazos rodear mi cuello.

En este momento podía sentir lo suave de su piel, el cosquilleo de su pelo al rozaba mi cuello y su aroma, ¡oh ese aroma! No exagero al decir que ella olía a rosas.

Después de un rato abrazadas, nos separamos con un muy obvio sonrojo por parte de ambas, después de "festejar" la aceptación de Delilah en el grupo me despedí y con paso decidido y rápido me dirigí a casa, tenía que cruzar por el parque, llegar a una intersección y doblar a la izquierda

"una...dos...tres...cuatro" contaba mentalmente las casas por las que pasaba "siete" detuve mi andar y sin mucho ánimo me quedé viendo aquella casa marrón de dos plantas "vieja" solo pensé en eso, las ventanas eran grandes y los marcos se encontraban desgastados, la pared estaba algo sucia y algunas ramas de los árboles se encontraban sin hojas otras habían caído a la tierra, esa casa estaba abandonada...Una chica murió ahí

"Alguien ya ocupa tu puesto en el equipo" pensé

"Te prometí que eras la única en mi vida...Pero ahora no estoy segura"

"Creo que esa persona también ocupo el puesto que tú dejaste en mi corazón...Ella tiene un lindo nombre, es Delilah" 

"Parece que su encanto pudo más que mi voluntad"

Giré mi vista hacia el frente y continúe mi camino, solo quedan dos cuadras y habré llegado.
Mi celular comenzó a vibrar dentro de mi bolso, lo saque y viendo la pantalla me debatía si debía contestar o no, al final no conteste ya que mi celular dejo de vibrar

"Seguro mis padres se preocupen por mi retraso, pero cuando llegue les explicare todo"