Capitulo 1

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Ciel veía la ventana de su cuarto viendo cada gota golpear su ventana acompañada de truenos que no dejaban de retumbar en la habitación, el joven peli azul sentía como le dolía el pecho al rememorar cada palabra leída minutos después, idiota, usado, torpe era poco para describir la forma en la que se sentía en ese instante

Lui no solo había sido su novio, en algún momento de su vida Ciel pensó que podría compartir su vida con él, que iluso fue. El maldito bastardo termino su relación de 6 meses con un simple ''terminamos'' en un correo electrónico.

En cuanto lo leyó, Ciel trato de llamarlo solo para escuchar que nadie contestaba. Así estuvo por un par de horas hasta que finalmente se dio por vencido, si pensar en formar un futuro con alguien con el que llevas una relación de 6 meces es idiota pero eso hace el amor ¿no? Volvernos ilusos a veces.

Y ahora aquí estaba sintiendo pena consigo mismo. Al diablo ¿quién necesita a Lui? ¿Quién necesita a alguien? Ciel se prometió a si mismo que esto no volvería pasar todo el mundo tiene un momento de locura; pues esta vez fue el de Ciel

-nadie va a burlarse de mi otra vez- dice limpiándose el rostro cuando escucha como golpean a puerta aun sin levantarse-¿Quién?

-Soy yo Ciel ¿Puedo pasar?-dice su madre desde el otro lado de la puerta

-No es buena idea mamá, me estoy cambiando

-Apresúrate ya casi nos vamos

-¿A dónde? - dice mirando la puerta prestando más atención

-¿Cómo que a dónde? Ciel hoy vamos a comprar la ropa para navidad

-Pero está lloviendo...

-¿Cuando no llueve en Londres, ah? Apresúrate, te espero abajo

-Voy - dice suspirando, había olvidado por completo ese detalle. Ciel se levanta borrando el correo electrónico de -Lui y apagando su computadora, yendo a su armario y comenzando a desvestirse tomando una camisa de lino roja y unos pantalones negros, poniéndoselo mientras que miraba colgada en la puerta de su armario una tira fotográfica de él y su expareja sonriendo

-No voy a darte ese poder sobre mi, Lui – susurra mientras siente como su pecho le dolía. Ciel toma la fotografía dirigiéndose a la papelera mientras toma ambos lados de la fotografía y partiéndola en dos, tirando los restos a la basura. Eso no lo hacía sentir mejor pero por algo se empieza. El joven toma su chaqueta y sale de su cuarto bajando lentamente las escaleras para reunirse con su madre.

-Bien mamá, estoy listo ¿nos vamos?

-Si claro - dice la mujer sonriéndole a Ciel mientras que el siente la mirada de su padre que lo veía desde el sillón. Su padre lo sabía, el siempre sabia cuando algo lo perturbaba y agradeció al cielo de que su padre le diera su espacio, lo que menos quería era hablar de eso ahora. En este momento odiaba todo, odiaba como se sentía.

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-Buenos días Alois - dice Ciel al momento de encontrarse con el rubio en el jardín de la escuela

-buenos días, Ciel - responde este con una sonrisa

-Buenos días Ciel - dice una chica rubia y de ojos verdes

-Buenos días Elizabeth - le contesta a su compañera apenas sonriendo

-¿Te pasa algo? – comenta la muchacha viéndolo

-No es nada... - responde mirando a Elizabeth mientras que la campana suena – Vamos...

-Ok, aunque siento que estas raro hoy - aclara adelantándose mientras que Ciel caminaba hacia el edificio sin ánimos

-Yo también te siento extraño, ¿Algo que contarme? - dice Alois caminando junto a el - ¿Le paso algo a Lui?

-Él es el problema... término conmigo ayer por un correo electrónico

-¿Enserio? - dice viéndolo asombrado - el tipo no me caía bien, pero eso es bajo

-Sí, y no me dio razones. Solo fue un ''terminamos'' y ya.

-Lo siento mucho Ciel, en verdad - dice abrazándolo comenzando a acariciar su cabello; Alois siempre hacia eso cada vez que Ciel se deprimía y... se sentía bien, pero aun dolía

-Gracias Alois - dice dejándose abrazar - no quiero ir a clase...

-Ven, vamos a divertirnos y a olvidar las penas – comenta el rubio tratando de alegrar a su amigo

-¿Nada de alcohol? – Responde Ciel

-No esta vez, aunque te haría falta – dice en tono burlesco mientras toma del brazo al chico y lo saca de la escuela.

Verdades OcultasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora