el ultimo aliento

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En el mundo antiguo, al norte del vasto continente europeo, había nacido la nueva orden de caballeros del templo de la región pagana de un mundo distorsionado. Dicha era dominada por  los caballeros templarios, nobles guerreros procreados bajo constante disciplina dispuestos a guardar y proteger los secretos del antiguo mundo y de su religión.

Los templarios eran comandados por el poderoso rey de las islas negras de Gales, el rey Darío quien dirigía al ejercito más temido de toda Constantinopla, los templarios se extendían desde Europa hasta Egipto, bajo una misma bandera, signo y rey.

Tan poderosa era esta santa orden que al extenderse por Asia empezó a representar una amenaza para los gobernantes de los pueblos protegidos por esto caballeros, esta situación llevo a los ricos terratenientes y gobernantes a unirse con el propósito de comprar la orden, pero el rey Darío se negó, esto causo gran enojo en los demás reyes de Europa y para obligar a cumplir amenazaron las familias de los templarios  a sus seres queridos los obligaban a entregar a su rey y entregar sus espadas o si no sus familiares morirían.

Pronto toda la orden se rebeló contra el rey Darío, lo capturaron golpearon torturaron ya hasta le hicieron ver llorar la muerte de su esposa violada y quemada y de su hija ahorcada para luego degollarlo y colgarlo en la plaza central de Inglaterra como muestra del trato que el trato se había cumplido.

Eso cuenta la leyenda, y eso fue lo que en verdad paso, 1500años después me encuentro yo aquí contando la trágica historia de aquel noble que antes de morir juro que la muerte no lo detendría y que jamás le daría paz a los apellidos de sus asesinos, he visto el horror salir de la tierra, he visto la sangre correr sobre las cuerdas y he visto la soledad derrocando a la alegría como una fiera.

Para mí todo comenzó hace 20 años atrás, Verónica Klose era la chica más deslumbrante de toda Londres, sus ojos azules pintaban es si hermoso rostro las ráfagas de luces provenientes del cielo. Ella y yo teníamos varios meses juntos como pareja pero tan solo una semana de vivir conmigo tan solo su dulce voz prestaba mí la felicidad en mi corazón, sus besos, su pasión, eran tan solos pequeños factores que  llenaban mi corazón.

Un día ella y mi persona sosteníamos una salida muy agradable, bajo mis brazos se hallaban los besos de sus dulces labios que chocaban junto a los míos, mientras mi corazón yacía con fuertes latidos como el de dos tambores de fiesta sonando al amanecer. De pronto su decisión de bañarnos juntos en el rio acelero mis pasos hacia el cielo y mis pies se hallaban en la tierra, retándome mientras bajaba su vestido de sus hermosos hombros, invitándome a ver su angelical cuerpo bajo el agua.

Me di la vuelta para seguir los mismos pasos, me quite mi ropa, poro de pronto sentí la presencia de alguien detrás de mi alguien escalofriantemente aterrador, mi piel se erizaba y mi palidez reflejaba el miedo que al voltear se convirtió en el más triste y dolor, allí se hallaba ella, totalmente descubierta bañada en el algo de la desgracia y pintada con el pincel del silencio, manchada con el rojo del susto y atada a la cuerda de la ausencia. Una soga alrededor de su cuello cortado con una especie de cuchillo grueso, como el de un carnicero marcaban las lágrimas en mi rostro y el dolor en mi corazón, sentí que no solo había perdido al amor de toda una vida si no también, mi aliento y mi corazón.

Nunca supe cómo fue los alguaciles nunca creyeron mi historia y por tanto 5 años de condena pague en la prisión de Newcastle, 5 años más tarde mi espacio vacío intentaba ser cubierto por una frágil capa llamada Grecia pince, creamosuna gran amistab durante todos esos años, trabajábamos juntos, luego de un tiempo la frágil capa se volvería mas solida al tener noción de que en su vientre se hallaba la sangre de mi cuerpo en plena formación, 6 mese después sentí que mi corazón se estremecía, desgarraba, luego de regresar a casa del trabajo vi el cuerpo de mi vida bañado en el mar rojo de la desgracia.

Esta vez fue ella la víctima, pase horas, días, meses, pensé que yo era una especie de asesino, las 3 mujeres más importantes de mi vida ya no estaba, un día recordé que cuando me hallaba en mi plena infancia, mi abuelo me contaba aquellas historias del espíritu del templario, pensé que eso tenia que ver algo conmigo, no me equivoque, de arriba veo ahora la sangre correr, con sed observo pruebas que no eran solo tres si no cuatro mujeres pues, mi preciosa verónica también en ella se hallaban seis mese de amo, ambas niñas, ambas pudieron haber sido mías, ahora agonizando veo de donde proviene mi apellido, mis ancestros quienes le causaron tal desgracia al rey Darío, y mirando al techo y a la soga que rodea mi cuello cortado, veo que mi vida solo ha sido otra víctima de su juramento final.

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⏰ Última actualización: Jan 21, 2014 ⏰

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