Defectuoso

Comencemos

Bueno, luego de presentaciones y cosas similares podremos dar comienzo a esto.

Me encontraba en mi casa con aquella intriga que les comenté anteriormente y como también sabrán, se me ocurrió la brillante idea de viajar. Y sinceramente... No sabía donde ir.

- Buenos Aires suena genial, ver tango en vivo y además apreciar el Obelisco... Wow, que fantástico sería - Pensaba, aún sin saber si tenía la plata suficiente como para salir de la ciudad siquiera.

Y para mi sorpresa... No tenía plata.

- Nice, ahora no puedo viajar... ¿Cómo puedo viajar sin plata?, estoy acabado. Tendré que trabajar hasta conseguir la plata - Decía devastado en mi mente y con un bajón de ánimo que ningún capítulo de Mister Bean podía arreglar.

Luego de haber pasado todo el resto del día bajoneado, decidí acostarme y con el poco de esperanza que quedaba en mi corazón, le pedí al destino que me dejara vivir mi deseo de viajar.

Esa noche no me costó quedarme dormido, inclusive, la mañana siguiente desperté muy bien y animado. Tratando de olvidar la idea de viajar me propuse hacer deporte.