capítulo 12: ¿Que cocinar?

4.5K 532 255
                                    

Hola de antemano me disculpo por los posibles horrores ortográficos que van a conseguir no tengo como corregirlos en mi lapto así que escribí en el teléfono espero y les guste el capi adiós. .xD

Pov Daniel.

Después de comer mire la lista al parecer sería el ultimo en cocinar,  después de todo el idiota Rey estaba dispuesto o era ignorar me o enseñarme una tonta lección como si me lo merecía. 

- por favor- bufe,  mientras aprovechaba que las primeras princesas iban a entrar en la cocina para fugar me al calabozo.

Decir que estaba feo como siempre estaba de más,  con una sonrisa casi forzada mire al guardia que cuidaba la entrada camine con inocencia mientras le hechaba un ojo.

-No- dijo y aun no había dicho nada.

- Porque no,  además no voy hacer nada- gruñi.

- el rey Lucían me dio órdenes muy explícita de no dejar entrar a nadie- gruñó.

- a Pero si tu no le dices ni yo lo digo como se puede enterar - murmura mientras ponía mi mejor cara de cachorrito arrepentido si claro como no,  este me miró con diversión.

- Por mucho que me encantaría ayudarte, me gusta tener mi cabeza pegada a mi cuello - me respondió. 

- Si eres un hombre revela te y déjame pasar - dije y se escuchó una carcajada en el pasillo

- o cariño creo que te quedaras sentado a Erick aún le falta muchos cojones para negarse a una orden del rey- soltó otro guardia con una sonrisa ladeada.

- Cállate Carlos- bufo enojado el guardia mientras empujaba al otro,  una estúpida pelea comenzó y no pude evitar sonreír de felicidad por ello.

- Bueno adios- dije bajito para correr a la entrada del calabozo,  no mire hacia atrás seguí hasta llegar a una sucia celda donde un deprimido Tom se encontraba.

- !Daniel!- grito sorprendido y algo preocupado de verme - que hicieses esta vez para que te mandaran aqui- pregunto mientras elevaba una ceja,  riéndome nege con la cabeza.

- No he hecho nada,  mira te traje comida no es mucha pero logre sacarla a escondida del comedor- dije mientras le sonreía. 

- Gracias - me respondió mientras su mirada se cristalizaba,  con ganas comenzó a comer me callo mal que lo que le estuvieran dando fueran las sobras de mi comida, definitivamente el no se merecía eso.

- No deberías darme la lo que te traje no fue mucho tampoco,  pero no te preocupes el rey acaba de abrí una competencia de comida así que créeme are unas deliciosas galletas y pan para que comas- dije con una sonrisa mientras pensaba en si debería hacer pan de guayaba o mermelada, umm era tan difícil de decidir.

- se supone que a quien le vas a cocinar es a mi,  no al prisionero- susurro una voz a mis espaldas,  un escalofrío me recorrió todo el cuerpo esto no era bueno para nada bueno.

- Lucían - murmura en voz baja mientras volteaba a verlo.

- camina- dijo con voz fría, sus ojos estaban provisto de cualquier emoción ciertamente esto no era bueno.

- e...

- !AHORA!-grito y no necesite nada mas que eso para obedecerlo, me daba miedo,  su forma de verme no era algo que me gustara.

Caminando a paso rápido salí de los calabozos con el corazón golpeteando mi caja torácica,  mordí con fuerza mi labio inferior,  mientras buscaba lo más rápido alejarme del.

Estaba tan apresurado que ni me importó no ver a los guardias,  solo quería en ese momento encontrar un lugar que me hiciera sentir seguro, no logre encontrar ninguno,  aunque tal vez mi habitación en este momento se podría considerar como uno.

No llegue a la puerta cuando un fuerte mano me tomo por el brazo no tuve que ser adivino para saber que era Lucían,  aun así Está situación no era como las otras.

-Daniel - su voz era un témpano de hielo, no era precisamente lo que quería pero podía trabajar con ello, sin darle tiempo de reaccionar bese sus carnosos labios para distraerlo.

Era exquisito, era una sensación rara y única que me dejó sin aliento, y eso que yo mismo lo provoque.

- me estas comprando- gruñó mientras sus manos rodeaban mi cintura.

- yo puff que te hace pensar en ello - dije haciéndome el inocente si claro.

- umm.. bueno yo pensaba dejarte verlo pero si tu...

- ¡¡me estas comprando!!- me queje.

- tu fuiste el que me beso - dice con una sonrisa.

- y porque eres tan tonto de caer con eso eres un rey da el ejemplo - lo regañe mientras hacia un puchero.

- si si si, por cierto que vas a cocinar me - me pregunta mientras elevaba una ceja.

- sopa- dije con inocencia mientras pensaba en echarle bastante salsa picante.

- porque sonríes tan amplia mente - dice elevando una ceja.

- por nada - murmuró mientras pienso a Lucían corriendo por agua - que bonito sueño- dije con una mirada soñadora.

- espero que no se te olvide que soy capas de destruir tu pequeño país con un chasquido de mis dedo  - dijo con una mirada diabólica. 

- por eso digo que mejor hago pan de guayaba- murmure deprimido.

- pan de guayaba no quiero ningún pan de guayaba, además Cómo pudes pensar que alguien como yo puede comer esa asq...- se callo.

- bien entonces cocinare lo que sea - dije sin ninguna emoción, sintiéndome dolido no creía que realmente un pan de Guayaba fuera algo asqueroso, a mi me gustaba y cuando me enamoré por primera. ..

- Daniel... - me grito Lucían lo que hizo verlo de nuevo a los ojos, en ese momento me di cuenta que las cosas habían cambiado a mi me gustaba Lucían, y para mi mal sabía que no sería correspondido ya no era cuestión de juego, sentía algo por el y sabía que saldria herido pues el solo quería una reina para ocupar un asiento pero nada más. 

- umm.. lo siento pero me dejarías sólo tengo que pensar que voy a cocinar - dije tratando que mi voz no saliera tan dolida como me sentía. 

- pero...-

- cierto are la sopa esa fue mi primera idea después de todo, bien te espero en el comedor voy hablar con los demás príncipes- dije para luego alejarme de Lucían no sabia como pero esta noche me iría del castillo, no esperaba esto yo no me podía enamorar no luego de lo que paso me prometí no hacerlo yo... que importaba el pueblo ellos de todas formas no sabían de mi existencia no me estoy engañando mi gente es importante pero. .

-No importa me iré y luego veré como evitar que Lucían comience una guerra contra nosotros - dije en voz baja, decidido a irme sabía que estaba  actuando como un cobarde pero no podía estar con un hombre que no me amaba, y que podría aprovecharse de mis sentimientos.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 16, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El ReyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora