Volviendo a la vida

Sonrisas de dolor.

hospital.
Un grande hospital.
luces blancas y gente corriendo atareada por los pasillos, ¡vaya! hasta pareciera que la vida de alguien dependiera de ello.
Estar en un hospital no le gusta a nadie y menos sabiendo que cada vez te queda menos tiempo.
Max todavía no sabía lo que le pasaba a Clara ya que ella no quería decirle nada, creía que Max ya tenía demasiados problemas como para también preocuparlo por otra cosa como esa.
Clara, estaba angustiada, de verdad.
Ella no sabía que le depararía el destino, qué pasaría después de todo esto, que sería de toda su familia al enterarse de la tragedia y sobre todo... que pasaría con Max.
lo que le dolía más era que no podía creer que su enfermedad no tenía cura.
El doctor no le daba esperanzas, algo sobre lo cual tener fe, nada, no le daba absolutamente nada.
bueno, según dicen la esperanza es lo último que se pierde, ¿o no?
Lo unico que no podía perder en ese momento era su dignidad; ella no podría hacharse a llorar como niña pequeña, tenía una enfermedad, ella quería afrontar las concecuencias.
Lo que hizo ella tantas horas bajo la misma luz blanca, tantas horas acostada en una cama sin poder moverse, era pensar.
Se lamentaba, podría morir en cualquier segundo.
El doctor dijo que era muy arriesgado salir del hospital, tenía que estar ahí hasta que algo mejor sucediera.
Clara a un dado momento debido a la gravedad de la situación, decidió llamar a Max, diciéndole que viniera al hospital de inmediato, que era una emergencia.
Max llego lo más rápido que pudo y en cuanto vio la situación en la que se encontraba Clara, el amor de su vida, rompió en llanto, no había llorado así antes.
No sabía qué hacer, desesperado, la abrazo lo más fuerte que pudo tratando de evitar lastimarla, pero las lágrimas no le daban para más.
El sabía que no quedaba mucho tiempo antes de que una tragedia ocurriera.
Clara ya no tenía la misma sonrisa de antes. Si, todavía sonreía, para evitar que el sufrimiento de Max fuera más doloroso, pero de todas formas, ella moría por dentro y tal vez, un poco por fuera también.
¿que haría ella, el resto de su vida, en una cama de hospital?
No quedaba mucho tiempo.