SOLO DIME TE QUIERO.

VUELTA A LA NORMALIDAD

-Blair, ven al comedor el desayuno esta listo!- gritó mamá.

-Ya voy mamá- contesté alzando la voz.

-Vamos Blair estoy harta de que siempre me hagas llegar tarde al trabajo- dijo molesta.

-Mamá deja de regañarme, vamos a llegar a tiempo, solo tienes que llevarme al campus de la universidad, ya tengo hechas las maletas, dame un minuto- manifesté gritando.

-Cariño, es nuestro primer día en esta ciudad tu no puedes llegar tarde a la universidad ni yo al trabajo, así que date prisa- parloteó mamá.

Salí de la ducha y me vestí lo más rápido que pude me puse una camisa de cuadros roja y negra y unos pantalones negros que combiné con unos botines de cuero con un poco de tacón, cuando terminé bajé las escaleras a toda prisa hasta el comedor donde encontré a mamá tomándose un café. Me estaba costando bastante lo de adaptarme al nuevo ambiente de Nueva York.

-Buenos días, estás bien?- preguntó.

-Si mamá, pero quiero volver a la granja me he criado allí y es dónde nací, esta ciudad es demasiado para mi- argumenté.

-Tu padre hubiese querido que rehicieras tu vida, sobretodo en esta nueva etapa de tu vida con una sonrisa, en Nueva York tenemos la oportunidad de empezar de nuevo, hay que aprovecharla así qué disfruta- contestó forzando una sonrisa.

-Papá esta muerto, supéralo- grité.

Rápidamente sin darle oportunidad de contestar cogí mi maleta y el desayuno y salí por la puerta casi corriendo, decidí ir en metro para no tener que hablar con mamá en el coche.

Me subí al metro y me costo encontrar un sitio para sentarme pero después de pelearme con mamá no me apetecía hacer nada no conseguía dejar la mente en blanco, bajé en mi parada y fui caminando hasta las puertas de Yale mi nueva universidad.