Una nueva vida, un nuevo comienzo que se suma a la lista. Ha pasado por esto tantas veces que siempre espera que no sea solo una vez más, solo quiere entender por qué le pasa eso.
Ella es única, especial, diferente, pero esa combinación es peligrosa.
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Cuando llego al instituto me siento total y absolutamente perdida, siempre me pasa eso el primer día de clases en todos los institutos a los que he asistido.
Pregunto dónde queda rectoría y luego de que me indican me dirijo hacia allí.
Pensaran que por lo que lo he hecho tantas veces se hace cada vez más fácil, pero saben qué: ¡es todo lo malditamente contrario! cada vez es diferente, un nombre diferente, una apariencia diferente, un estado diferente, una estúpida vida que empezar diferente, mentiras diferentes...Bueno, pues creo que antes de empezar a relatar debería preséntame.
Mi nombre es Sharit y he pasado por cada uno de los nombres que puedan imaginar, tantos que hasta ya perdí la cuenta.
Mis padres murieron en un accidente cuando yo apenas tenía cuatro años. Desde entonces una señora, Mika, que apareció de la nada me cuido mientras cumplí quince años, cuidaba de mi solamente en mi bienestar físico por así decirlo, en si comía, si llegaba a casa y ya, nunca nos relacionamos realmente a pesar del tiempo que cuidó de mí, en realidad tampoco es que eso fuese indispensable para mí, él día de mi cumpleaños desapareció de la misma forma que llegó, la verdad siempre le he le agradecido mucho, sin ella creo que me hubiese muerto de hambre.
Lo más raro de su misteriosa partida fue una pequeña nota que dejó para mí. La que dio inicio a esta locura que es mi vida en este momento.
Desde entonces he pasado mi vida absolutamente sola. Creo que es lo mejor, aunque el primer año se me hizo difícil, el tema de los padres en los institutos y todo eso no era algo tan fácil considerando que aún era menor de edad y que desde mis 16 años no crecí ni cambié en lo absoluto, pasaban los años y me veía igual, ahí comprendí lo que Mika me dijo alguna vez, no era como las demás personas, era diferente, alguien "especial" aunque aún no entendía nada de lo que me pasaba. Así que desde entonces cada año intento cambiar un poco mi apariencia: mi cabello, que naturalmente era café rojizo, lo he cambiado mil veces, tanto el color como el corte y todo eso. Ahora es una mezcla entre rubio cenizo y azul, ¡Hermoso! Lo sé, mis ojos sin lentes de contacto son café claro, y pues por el momento traigo unos lentes de contacto azules verdosos, los uso por motivos de salud, algo que sí ha cambiado es mi vista, al pasar de los años mi vista se ha ido agudizando y puedo llegar a ver mucho más de lo que cualquier ojo humano puede llegar a ver, ilógico ¿no? Pero así es, creo que va en esa parte de ser "especial" y los lentes son especiales puesto que me ayudan a mantener mi vista a lo que un ser humano "normal" la tiene, También por seguridad los utilizo, ayudan bastante a la de cambiar mi aspecto. A pesar de que son demasiado incómodos. También tengo mis lentes normales, pero en mi antigua apariencia los usaba, y quería cambiar un poco.
No soy muy alta que digamos, mido 1,68cm y mi contextura es delgada, y aunque coma o no, siempre tengo la misma, nunca cambia.
Aceptar todo esto me llevó un tiempo, cuando Mika me dejó esa nota creí que estaba loca, pero al notar que no cambiaba nada de mi decidí ir al médico y comentarle lo que me pasaba, después de que me hicieran miles de exámenes me encerraron en una habitación que no tenía ninguna salida o entrada a parte de la puerta por la que entré, la cual cerraron inmediatamente.
