Capitulo 1

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*PI PI PI PI PI*

Mi despertador sonó. Hoy era lunes. Solo faltaba una semana para iniciar las clases. Me levante de mi cama y salí de mi habitación para entrar al pequeño baño del departamento. Me di  bañe rápidamente y salí del baño con la toalla alrededor de mi cuerpo. Abrí el primer cajón del mueble donde guardaba mi ropa interior. La saque y me la puse rápidamente pues hacia mucho frio. Después fui al closet y saque un pantalón de mezclilla, una blusa blanca y un suéter café. Me lo puse y agarre unos botines del mismo color del suéter. Fui al baño y recogí mi larga cabellera en una alta cola de caballo y puse un listón rosita, no me maquille pues nunca lo hago. Voltee al espejo y vi mi reflejo. Tengo el cabello castaño y en algunas partes los mechones más claros, tengo los ojos entre verde y café, mi pies es clara, soy alta pero no tanto y mi cuerpo no está mal. No me considero bonita pero algunas personas ya me lo han dicho. Salí del baño y agarre mi bolso para dirigirme a la cocina. Al entrar abrí el refrigerador para haber que había de comer y solo me encontré con dos manzanas, huevos y residuos de la comida de ayer. Cogí la manzana y me la lleve a la boca para darle una pequeña mordida. 

- ¿Porque te levantas tan temprano hija? - Escuche a mi mamá detrás de mí. 

- Recuerda que tengo que ir a buscar trabajo. - Le dije sonriéndole. 

- Ah, hija no sabes cuánto lo siento... - Dijo mi mamá y al instante se le empezaron a cristalizar los ojos. - No quería que nuestra vida fuera así. Lo siento mucho. Tú no tendrías que trabajar... 

- No te preocupes mamá. Voy a buscar trabajo porque yo quiero. Acuérdate que las dos vivimos aquí, ósea que yo también tengo que ayudar en algo para la casa. - Le dije y la rodee con mis brazos mientras ella lloraba. No me gustaba verla así. 

- Muchas gracias cariño. Te amo y quisiera darte la vida que tu mereces pero no puedo. - Me dijo y se separó de mí. 

- Gracias a ti mamá. Yo también te amo. Tal vez si mi padre estuviera con nosotras no viviéramos así pero diosito ya se lo llevo con él y nosotras tenemos que ser fuertes - Le dije y ahora yo soy la que estaba llorando. Mi madre se tensó. 

- Si hija... Bueno regresa temprano a casa, iré al baño. - Dijo mi mamá un poco nerviosa y salió de la cocina. 

No sé porque se habrá puesto así. Salí del apartamento, cruce el pasillo hasta llegar al ascensor. Tenía una hoja enfrente que decía *FUERA DE SERVIVIO* ¿PORQUE? mi departamento está en el 5to piso y no servía el maldito ascensor. Maldije por debajo y fui a las escaleras. Baje los escalones un poco apresurada. Apenas iba en el 3er piso y ya estaba más que cansada. Aun así seguí bajando pero un poco más rápido y al dar la vuelta choque con alguien. 

- Perdóname, perdóname... - Dijo el chico que había provocado un pequeño tropiezo de mi parte. Voltee a verlo y era muy guapo. Ojos color azul cielo, cabello castaño como el mío y muy alto. 

- Perdóname a mí... -  Dije volteando a ver el piso. Siempre me comporto así con las personas. Soy muy penosa. 

- ¿Vives aquí? - Me pregunto buscando mi mirada que aun seguía clavada en el piso. Como respuesta asentí con la cabeza. - Ohh, aquí vive mi hermana y vine a visitarla. 

- Ahh, pues mucho gusto. - Le dije rápidamente para seguir bajando las escaleras. Senti que el agarro mi muñeca y voltee a verlo. 

- ¿Cómo te llamas? Yo soy Drake. - Me dijo con una hermosa sonrisa. 

- _______. Y ya me tengo que ir. - Le dije con una sonrisa en mi rostro. 

- Oh.. Pues mucho gusto _______, ojala te vuelva a ver. - Me dijo "Drake" soltándome la muñeca. 

Le sonreí y seguí bajando las escaleras. Hoy necesito encontrar el trabajo. A mi mamá no le dan una mensualidad que valga la pena a las 8 hr. que trabaja por las noches en el hospital. Cuando por fin llegue a la planta baja salude al portero con una mano y salí de ahí. Había buscado en el periódico ayer en la noche trabajos. Agarre al bus y fui al primer lugar a donde iría para secretaria por las tardes. Deje un pequeño curricular al igual que los demás tres trabajos después. Estaba muy cansada, agarre 4 autobuses y en 3 me toco ir parada porque todos los asientos estaban ocupados. Decidí irme caminando a mi casa. La verdad no creo que me den ninguno. Nunca había trabajado para secretaria y las demás que estaban ahí ya tenían experiencia. Ya eran las 6 de la tarde y el sol ya estaba por irse así que apresure el paso. Para cruzar una calle tenía esperarme a que estuviera el semáforo de los que caminan en verde. Espere y se puso en verde y cruce cuando un estúpido carro que no se fijó me pego fuertemente en el torso. Por suerte tuvo tiempo de frenar pero mi torso me dolía demasiado. El señor se bajó rápidamente de su carro. 

- Oh dios mío!! Perdóneme señorita!! Yo no quería!! -  Me decía preocupado el señor que me había atropellado. - ¿Esta bien señorita? ¿Dónde le pegue? - Me decía viéndome. Se veía de unos 40 años cuando mucho. 

- Oh sí, no se preocupe... No fue mucho - Le dije con una voz apenas audible... Me seguía doliendo mucho. 

- ¿Como que no fue mucho?  Se ve que aún le sigue doliendo. - Dijo el señor muy mortificado. No le puse contestar y una lágrima de dolor salió de mis ojos. El señor se percató de eso. - Déjeme la llevo al hospital. Tal vez es algo grave. 

- No, no se preocupe... Aparte no tengo dinero para pagar en el hospital. - Le dije un tanto apenada. 

- ¿Qué? ¿Cree que yo dejaría que usted pagara? - Me dijo un poco obvio. - Súbase a mi carro yo la llevare a uno. Obedecí y el me ayudo a caminar para subirme a su carro. En transcurso del camino el aparte de pedir repentinamente perdón me conto más sobre su vida. Al igual que yo. La dije que salí a buscar trabajo y sobre mis estudios. Al llegar me atendieron bien y dijeron que solo fue el dolor por el golpe pero que no era nada grave. El señor se ofreció en llevarme a mi casa y yo acepte pues ya era una poca noche. Su nombre era Des Styles y al parecer tiene mucho dinero. Dinero que yo no lograría tener en toda mi vida. Al llegar él se quedó pensativo. 

- Muchas gracias señor Styles por traerme a mi casa. - Le dije con una media sonrisa en mi rostro. 

- No tienes por qué agradecer ______. Y llámame de tu por favor. - Me dijo y soltamos una risita. - Oye ________, dijiste que necesitabas trabajo verdad? 

- Pues sí, para ayudar a mi mamá y para estudiar. Pero es muy difícil encontrar. - Le dije un poco desanimada.

- ¿Que dices si yo te doy trabajo y te meto en un muy buen instituto? - Me pregunto el señor Styles con una sonrisa. ¡¿Que me acaba de ofrecer?! Le diría que si pero sería demasiado.

- ¿Cómo? - Le pregunte un poco incrédula y confundida a la vez. 

- Si, como me contaste que eres buena en matemáticas en mi casa necesitamos quien nos haga las cuentas de lo que gastamos al mes y aparte otras cosas conforme a mi hijo y  lo del instituto no es ningún problema. Te puedo hacer una beca. No sería difícil. - Me dijo felizmente pero no sabía si aceptar o no. 

- Pues...

"SORRY"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora