Mi Vida Entre Chicos

Cap. 8

Me levanto mirando al rededor estoy en ¡el campo de fútbol! ¡Como puede ser!
No espera si se cómo, ayer me quedé entrenando sola hasta tarde, no apareció nadie, o eso creo, por suerte, y entre una cosa y otra me quedé hasta las tantas y con tanto sueño que me dormí.
~estúpida, pillaras un resfriado~ cuanto tiempo querida, pero no el suficiente. -le respondo a margarita

Y con esto me fui corriendo a la habitación.
Los pasillos estaban solos ¿qué hora sería? Y con estos pensamientos llegue a la habitación.
Abrí la puerta de golpe y para mi sorpresa estaba Dylan de brazos cruzados en la puerta mirándome.
-¿Donde estabais?- me medio-grita
-¿Nosotros?
-Si, vosotros -señala detrás de mi
Me giro y veo a Thomas.
-¿Donde estabas?- decimos los dos a la vez

-¡No me copies!- volvemos a decir a la vez

Y así nos quedamos un rato, explicando que hacíamos. Yo le conté que me quedé dormida en el césped, pero Thom no dijo nada, se quedó en silencio mirándome. Dyl no pareció creerme del todo, pero lo dejo pasar.

Después de un rato charlando como gente civilizada, si, civilizada, al final fuimos a las pruebas, dónde me encontré con todos.

Mucho tiempo después.

Como todo el mundo dice pasado pisado, pero yo no lo puedo olvidar. El qué, os preguntareis; pues resulta que me he presentado a las pruebas de fútbol americano, pero al ser un colegio de chicos no sabían si me podían permitir jugar. Lo bueno fue que no tenían ninguna norma, obviamente, y la mala fue que no había vestuarios de chicas, sí como leéis tengo que cambiarme con los chicos.

-NI DE COÑA- grité al entrenador- no me voy a cambiar con los orangutanes esos.

-Lo siento cariño, es la única solución- me dijo lo más calmado posible

-¿Y si entro cuando todos salgan?

-Si no te importa esperar, puedes hacerlo, pero no llegues tarde a ninguna clase o te dejo fuera- me dijo muy serio

-Gracias, gracias, seré puntual, lo prometo- sonreí y me tire al césped a esperar a que todos salieran.

Después de muuuuuuuchoo rato, terminaron todos de salir y yo entre. Solo que daba un chico, y era nada mas y nada meno que Gabe.

No me desagradaba este chico, pero no sabía que pensar de el, con esos tatuajes y ese aire misterioso y de superioridad, así que hice lo más maduro que se puede hacer en estos casos...
Me metí en la primera ducha libre que encontré sin que gane me viera, claramente no sabía que decirle, así que simplemente me empecé a duchar.
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Bueno chicxs siento mucho la espera, pasé una mala racha, pero ya estoy de vuelta lista para todo y para llenaros de nuevos capítulos.

¿Que tal? ¿Os gusta como va la novela? Espero que sí, tengo muchas ideas en mente, listas para sorprenderos.

Espero seguir viéndoos por aquí. 

Con amor, Natt.