Lena

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No me lo puedo creer, esto no me puede estar pasando.

Después de una semana súper ocupada estaba en un autobús de gira directa a nuestro primer destino:

Nueva York.

-Mi estilo de fotografía es mas jugar con las luces y las posturas, me gusta que la gente se vea guapa- Susan y yo íbamos sentadas una al lado de la otra en unos sofás.
El autobús era muy largo y contenía al final cuatro literas con cortinas, un baño, unos sofás largos y negros, la tele de plasma mas grande que he visto en toda mi vida y varias consolas y altavoces.

Susan era muy buena gente, era amable y risueña, nos llevábamos bastante bien.

-Pues yo creo que lo mio es más reflejar emociones, no creo que una foto tenga sólo que salir bien, es como un cuadro, tiene que representar algo, que cuando la veas te diga algo de ese momento y esa persona- Le explico mientras como unos regalices.

La llaman al teléfono y suena la típica canción de Iphone - Lo siento, es mi madre, tengo que cogerlo - Se va hacia el lado del conductor a hablar mas tranquilamente.

Me despido de Axl y su otro amigo y paso a la parte trasera del autobús, abro la cortinilla de una de las literas y me meto a dormir un rato o eso intento por que el vehículo no para de moverse y pasar por baches.

Me pongo los auriculares y escucho música un rato hasta que empiezo a oír que fuera también hay música.

Axl, está tocando una canción con la guitarra y Susan y el otro chico que es rubio la escuchan prestando atención y moviendo sus cuerpos delicadamente de lado a lado.

La canción es Photograph de Ed Sheeran, lo típico.

Axl canta como los ángeles, es la mejor cover que he escuchado en toda mi vida, no creo que nunca mas vuelva a escuchar la canción original.

Aplaudo y me siento en el suelo al lado de Susan.

Axl sonríe, tiene una sonrisa preciosa, no nos engañemos.

-Gracias, gracias-Se levanta y hace una reverencia.- ¿Ahora cual?

-Yellow de Coldplay- Le sugiero.

-Yo digo, Let it go de James Bay- El rubio tiene buen gusto- Por cierto, eras ¿Leah? ¿no? Soy Harold Andersen.

-Lena- Le corrijo - Y la tuya me vale, me encanta esa canción-Le sonrío y él me devuelve la sonrisa.

-Iros a un hotel-Bromeó Susan y todos reímos menos Axl, se ve que él era un chico poco bromista.

Mientras Axl nos deleita con su voz me permito unos momentos de reflexión.

Me encuentro en un momento de mi vida en el que no se que quiero y no se que pasa. Me gusta fotografiar, pero hacer foto a las personas no es lo mio.
Se supone que tengo que tener las cosas claras, metas en la vida pero soy fotógrafa, que es lo que siempre he querido ser y no soy feliz, en mi vida falta algo de acción, mis dos hermanos mayores se han ido de casa y viven sus vidas felices, cumpliendo su sueño. Se supone que estoy cumpliendo el mío pero no estoy bien, es como si algo faltase y no se muy bien que es.

¿Sabes cuando te quedas embobado mirando a un sitio y pensando o directamente sin pensar en nada? Eso me esta pasando y me están mirando raro.

-Me he quedado embobada-Puse una sonrisa de boca cerrada.

-No pasa nada, a todos nos pasa- Susan me devolvió la sonrisa.

Después de parar a cenar en un restaurante y volver al autobús, cantar canciones, reírnos y dormir, llegamos a nuestro hotel.

Susan y yo tenemos un horario donde haríamos las sesiones de fotos, luego tendríamos que acompañarlo a los eventos y conciertos para seguir haciéndole fotos.

Axl MooreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora