Un día cualquiera yo conocí a una chica, una chica muy bonita. Al principio yo no me anime a hablarle porque se vía muy mamona.
Al paso del tiempo le comencé a hablar porque íbamos en el mismo grupo, esa chica fue algo así como la típica niña de amor imposible de alguien, pues si, así era ella para mí.
Con el tiempo yo le comencé a hablar o ella a mí, en verdad no lo recuerdo.
Pero con el paso del tiempo esa chica comenzó a llamar mi atención más y más, hasta llegar al punto de insinuarle estar juntas, más que amigas, pero ella nunca lo notaba. Al principio yo tenía miedo de decirle-¡oye eres muy bonita!, me agradas.- porque era mi amiga y no estaba segura de tener una oportunidad con ella.
Así que no le daba mucha importancia, creía que iba a ser un gusto pasajero.
Con el paso del tiempo comenzaron a pasar cosas muy extrañas como el que yo le hablara más y más, llegar al punto de ser muy buenas amigas, donde yo ya le tenía cierta confianza y ella a mí.
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Esto en realidad pasó en mi vida.
Y me estoy sintiendo mal al escribir esto, pero quiero hacerlo, quiero escribirlo.
02-02-16
2:13 a.m
