Teen idle

Diecisiete años

Desearía ser un adolescente.

Un adolescente holgazán, alguien que no tiene porque preocuparse por la muerte o la de su su padres, un adolescente que no sienta miedo a un loco que tiene mi vida y la de todos los que amo en sus sucias y repugnantes manos.

Un adolescente holgazán que su mayor preocupación en el mundo sean sus calificaciones.

Ojalá tuviera la libertad de expresarme con seguridad, de decir lo que pienso.

Poder decirle que lo amo y siempre fue él quien me traía hecho un imbecil; que las circunstancias no hagan imposible nuestra relación. Que las decisiones de los demás no estén sobre las nuestras y nos impidan vivir. Que los bandos que eligieron para nosotros no nos separen.

Nos quitaron los sueños y esperanzas, nos quitaron todas nuestras posibilidades. Y no sólo a mí y a él, a todos la gente involucrada en esto, eso hace que me llene de rabia e impotencia, no puedo hacer nada y eso me frustra.

Siento que mi juventud se desperdicia en una guerra que iniciaron nuestros padres, se desperdicia en batallas e ideales que yo creo inútiles...pero claro, no puedo hacer nada, eso ya no importa

Dejó de importar hace mucho tiempo, a nadie le interesa lo que yo tenga que decir al respecto.

Desearía con toda mi alma ver a mis amigos otra vez y tomarnos una cerveza como lo hacíamos hace algunos meses atrás; hacer una estupidez solo porque me da la gana, besar a alguien, tener una fiesta donde me divierta hasta perder la conciencia. Desearía otra vida, otra situación, otra circunstancia; un universo alterno donde no tenga que sufrir por cosas que por las cuales no debería estar sufriendo.

No quiero ser diferente ni especial para esta guerra; quiero bailar, emborracharme, drogarme, sentir la alegría otra vez. No quiero estar al borde de el colapso, no quiero estar roto, tampoco quiero estar entre la delgada línea de la cordura y la locura esperando con ansias que todo termine de alguna u otra forma.

Quisiera estar estudiando para un examen, castigado por mala conducta, robando alguna cosa, desobedeciendo a los mayores; porque es lo que debería estar haciendo. No debería estar en medio de la batalla viendo cómo se matan unos entre otros.

Quiero ser un adolescente, quiero quedarme en casa todo el día, llorar de risa y reírme de el dolor.

Deseo amar, ser feliz, sentir aquel cosquilleo en el estomago a causa de alguien que también sienta ese cosquilleo. Sonreír bobamente y con seguridad pedir que me acompañe, ¿A dónde? No lo sé, solo que me acompañe. Pero en lugar de eso, él ha estado entre la vida y la muerte más de una vez y yo puedo verlo, lo observo, su cuerpo sin vida. Culpó a todo el mundo, me culpó a mi; otra vez la rabia y la impotencia me invaden y se apoderan de mi.

Desearía tener 17 años, ser estupido y culpar a las hormonas. Es tan irreal que hace pocos años jamás hubiera imaginado que esto pasaría, hace unos meses atrás la guerra solo eran rumores, rumores y nada más; pero todo pasó demasiado rápido y ahora...
Desperdició mi juventud.

Quiero ser un adolescente holgazán.
Quiero que el mundo se vaya al carajo.

Si, el nombre de el capítulo me recuerda a esa canción de los Ángeles azules...no por nada lo puse :v

Es mi primer Fanfic, y no es tan bueno pero estoy satisfecha; espero que le den una oportunidad como yo también lo hice y tal vez dejen su opinión, un insulto...o tal vez nadie leerá esto y si llegaste hasta acá: ¡felicidades! te has ganado un lugar en mi corazón.

Los hamo musho aunque no sé que pedo con ustedes, no los conozco. Bai