12:00pm

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Tenía miedo, mi sudor caí como cascada, no sentía mis piernas, mi respiración era agitada.

El dolor era tan desgarrador, si gritaba nadie podía oirme, mis manos estaban encadenadas al igual que las piernas, no es la primera ves que pasa esto.

El me maneja a su antojo, para el soy un juguete, aveces juega con mi mente y me hace pensar que me quiere pero sólo es un maldito juego y yo sigo callendo.

Escuchaba mi corazón latir a un pulso imaginable, hay un quiebre en la vida donde piensas si Seguir luchando o no.

El crujir de los escalones me hizo alzar la cabeza, sus ojos eran de pura locura, su cuerpo era esbelto y marcado, su sonrisa era oscura y macabra, tan sólo ver lo me daba escalofríos.

-¿Ya aprendiste?-con la sonrisa a un más grande, sus manos me tocaban las esposas de los pies y subía poco a poco hasta llegar a mi cara.

-¿Dónde debiera cortar esta vez? O mejor, ¿Que debería romper?-con lágrimas en los ojos movi mi cabeza negando.

-No quiero, por favor *sollozo*, ya aprendí mi lección-Dije mientras el me agarraba la cara para que lo viera a los ojos.

- No, no, no. No llores- me secó las lágrimas-Eso te enseñará a no intentar escapar de mi, ¿QUE NO ENTIENDES? YA ERES PARTE DE MI- me dijo riéndose y juntando sus cara con la mía.

-¿No te divierte?-me dijo susurrando al oído, su voz era como la de una pluma pero te pinchaba como un espino. con tal de vivir asenti.

-Bueno tengo hambre- se separo del suelo, buscó unas llaves y me soltó de las esposas-Esperó que tu igual, no quiero comer sólo, quiero que me hagas dé cenar-.

Me alzó, sentía como si tuvieran lava en mis muñecas y tobillos, me ardían y dolian, me quejaba cada vez que Sang Woo subia un escalón. me llevo en sus brazos a la cocina, me sentó en la maldita silla. Hubo un silencio sepulcral después de minutos me abrazó en mi cintura y colocó su barbilla en mi hombro.

-No vuelvas a escapar, ¿Entiendes?- me dijo en susurros, sentía sus labios en mi oreja. asenti otra vez con la cabeza.

-Bien iré a comprar lo que hace falta, no tardó y recuerda- Tomó su chaqueta, dio unos pasos hasta llegar a la perrilla de la  puerta y  grito -no pases de la linea, Bum-

Cerró la puerta de golpe y se fue, apoye mi cara en el lava platos y me desahogue.

Esto no se terminará nunca. Jamás.

Fin del capítulo, espero que les guste, quise castigar a bum un poco, pero sigan leyendo hay una sorpresa 7u7 💀.

killing stalking "Un Amor Psicópata"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora