『1』

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Narra Cristina:

Siempre me han emocionado mis sueños con él, se sentían tan reales que hasta aveces daban miedo, yo quería seguir soñando más, no quería separarme de él y tener que vivir esa cosa tan cruel llamada realidad. Pero lamentablemente tenemos que despertar... Pero... No ahora, ya que toda historia parte a raíz de un sueño

Tranquila, algún día estarás conmigo, nee~ teddy?—

—Eso espero—

Dije sonriendo por lo bajo, ahora me encuentraba en los jardines de la mansión, habíamos decidido salir ya que hoy no había mucho sol y corría aire fresco

A Kanato le gustó la idea de comer sus postres al aire libre, generalmente le irritaba el sol pero como el clima era medio raro a él no le incomodaba en absoluto

—Hum... Cris-san anda un poco pensativa, acaso... No estarás pensando en olvidarme no?!—

Dijo mientras lágrimas amenazaban con salir,aveces se comporta como un niño pequeño pero eso lo vuelve más adorable

—Como piensas eso? — cuestióne mientras lo apegaba a mi para abrazarlo— Creo que me volvería loca si no estuvieras — solté y escuche una pequeña risilla de parte de mi acompañante a la vez que me correspondía

— Nos alegra escuchar eso, no es cierto teddy? -Dijo mientras se separaba un poco para luego mirar en la dirección del oso y luego a mi quedando a centímetros de distancia—  Nee sabías que Teddy es un gran consejero? Me acaba de dar una buena idea! — mencionó entusiasmado con un ligero rubor en sus mejillas—

—Se que la curiosa mató al gato pero... Que clase de idea?— Dije separadome un poco

—Teddy me dijo que podía hacerte una de mis muñecas! No crees que sería divertido? Ya nunca te tendrías que separar de mi! -Me volvió a abrazar mientras tenía una hermosa sonrisa en el rostro-

—Bueno, si tanto te hace feliz yo- — me tuve que detener ya que escuche el horroroso sonido del despertador

—Haz que pare! Odio las cosas ruidosas! —

—No puedo hacerlo— Dije mientras llevaba mis manos a mis oídos, el sonido era realmente insoportable

—Realmente te tienes que ir? -Dijo triste— La otra vez podrías programar el despertador unos minutos más tarde...

—Si sigo así no llegare temprano al instituto, ayer lo programe 10 minutos después de la hora habitual para seguir charlando contigo...!

—Ya veo... Entonces, adios Muñeca-chan~ -le dio un pequeño beso en la frente a la fémina y después el escenario desaparecio

La pelinegrina abrió los ojos con sorpresa —te maldigo despertador.... -Dijo mientras apagaba a alarma de su celular

Solo te amo a ti (KanatoxYopxAzusa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora