Story of my life

Dia del estimado concierto

Octavo Capítulo

No había dormido nada cuando...

Siento un terremoto en mi cama y gritos de Andrea.

- ¡Cinco de la mañana! -Un grito en mi oído.

- Ya ya, enseguida me baño. -Me pare y me dirigí al baño. - Ha y Buenos días. -Aún estaba dormida.

- Igual para ti. -Ella Rio.

Me estaba bañando, apenas puse mi cara en el agua, me desperté completamente y caí en cuenta de que era veinticinco de abril, no era cierto llego el día que espere por tres años con ansias, llego el día en que podría cantar sus canciones con más sentimiento de lo que lo pude haber hecho alguna vez, era el día, de llorar y sonreír, gritar y vivir esto como si fuera la única y última vez.

Salí de bañarme y Andrea ya no estaba en mi habitación, había alistado lo que me pondría y lo que llevaría al concierto desde el día anterior, me puse un jean, mis tennis blancos, mi blusa de "Cool kids don't dance" blanca, Zayn tiene una igual por eso la mande a hacer, es hermosa.

Termine de vestirme y arreglarme, cogí mi bolso, lo cruce desde mi hombro, y baje.

- Estoy lista.

- Por fin. -Dijo Andrea.

- Tu desayuno. -Dijo mi mamá, poniendo un plato de huevos revueltos con jamón y queso y un vaso de café.

- Eh, gracias mamá. -Mire la comida.

Estaba muy nerviosa, la comida no pasaba de mi boca, no había ni comido dos cucharadas.

- Mamá, no puedo desayunar.

- ¿Como que no puedes desayunar? ¿Estas enferma?. -Pregunto mi mamá.

- Es que estoy nerviosa, la comida no me baja, no puedo, tengo la garganta cerrada.

- Si no desayuna no hay concierto. -Dijo muy seria.

- Carolina Martínez por favor, desayuna ya, hay que irnos mujer. -Dijo Andrea.

- Pero no puedo, apuesto que tu tampoco desayunaste. -Me voltee y la mire.

- Ehh, yo si desayune. -Supe que mintió.

- Uy si, ¿pretendes que te crea?

- Caro, por favor tenemos que irnos. -Hizo pucheros.

- Lo voy a intentar, pero es que.. Dios estoy muy nerviosa.

Comí lo que mas pude, deje maso menos la mitad de mi desayuno, pero mi mamá al fin nos dejo salir, ella nos llevo hasta el estadio y estuvo acompañándonos casi hasta las nueve de la mañana.

No habían muchas chicas eramos de las primeras, debíamos esperar hasta las diez para entrar al primer filtro en el que revisarían nuestras boletas. Mi mamá volvió después de las diez cuando ya habíamos pasado el primer filtro.

- Oh por Dios! Sabes que hora es mamá?

- Si como las 10:30.

- Eso significa que solo quedan ocho horas para estar en el estadio esperando que los chicos salgan y empiece el concierto. -La grite.

- Si si lo se, calma.

Ya habían pasado mas de las doce del medio día, mi mamá nos llevo algo para almorzar, me obligo a comer ya que yo no quería, los nervios me comían viva. A esa hora ya habíamos pasado un filtro mas, estábamos muy cerca de la entrada al estadio, no veía el momento de entrar, había muchísima gente al rededor del estadio, se escuchaban gritos, chicas cantando, se escuchaba de todo.