Capitulo 2

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El cometa.

Los tres bajamos del tren, todo era tan rústico y había plantas de trigo hasta donde se podía alcanzar a ver, todo era reconfortante, era como estar en casa de la abuela, era seguro. Los tres fuimos a la caja de cobro esperando saber dónde demonios estábamos pero para nuestra sorpresa como si fuese alguna película o libro de zombis de adolescentes, estaba vacía. Sin darnos cuenta Carina se alejó de nosotros y juro por mi madre que si salía un zombi en cualquier momento no volvía a ver películas de terror en mi vida. Escuchamos ruidos extraños por la parte trasera y hasta la madre de asustados fuimos a revisar como en toda buena película de terror donde todos mueren. Ya en la parte trasera lentamente se escuchó como si una especie de olla de metal hubiese caído. Brayan y yo no tardamos en ver que Carina estaba tirada en el suelo y sin pensarlo corrí a su lado, me arrodille y trate de despertarla y juraba que veía que ella estaba transparente, no podía creerlo y entonces Brayan grito

-¡Jul, tenemos que hacer algo!

Fue entonces cuando pude ver a Carina normal, realmente juraba que la había mirado transparente a lo cual no le tome mucha importancia y lentamente ella comenzó a abrir los ojos. Comencé a gritar como loco

-¡Carina realmente tienes que despertar! Tal vez no sepa quién eres o que te gusta pero aun quiero conocerte y saber incluso la cosa más estúpida sobre ti.

Carina lentamente tomo mi mejilla izquierda y me miro a los ojos y dijo

-Eso es demasiado lindo, me alegra haberte conocido. Más les vale que no se hayan aprovechado de mi estado inconsciente par de idiotas.

Brayan se acercó y me ayudo a levantar a Carina diciendo

-Venga Jul, tenemos que levantar a esta carga.

Carina molesta se levantó y contesto

-No necesito tu ayuda ni la Julden, yo puedo sola y siempre he podido sola. Realmente no tienen que esperar nada de mí porque yo tampoco espero algo de ustedes.

En ese momento pensé que era alguna de sus bromas típicas donde termina riendo, pero algo en su mirada realmente me inquieto. Solamente le hice una vaga pregunta.

-¿Realmente estas bien? Quiero decir, ¿a qué se debe ese carácter?, los tres somos amigos Carina.
Carina enfureció y me respondió

-Por favor Jul, él no es mi amigo y mucho menos tú, tal vez es hora de que tomemos caminos distintos y cada quien busque una maldita forma de volver a casa, si ustedes quieren quedarse a esperan el siguiente tren está bien, yo buscare a alguien que me diga donde carajos estoy y largarme a casa.

Carina salió por la parte de atrás y le pregunte a Brayan

-¿Qué deberíamos hacer?

Brayan me respondió

-Escucha, realmente ella tiene razón, simplemente ella es una extraña para nosotros y posiblemente solo nos de problemas, si ella quiere hacerlo a su modo, adelante.
Algo molesto le dije a Brayan

-Realmente no quiero volver a perder a un amigo, y si puedo salvarla la cargare las veces que sea necesario, quien deja que su orgullo lo domine siempre terminara solo y algunas veces el orgullo es algo pasajero. Iré por ella.

Salí por la parte trasera y a lo lejos pude ver a Carina en una especie de parada de autobuses, corrí a su lado, y al sentarme pude notar que lloraba, aún recuerdo sus ojos, eran tan hermosos que dolía y era como si del cielo cayesen cometas a destruir su hermosa mirada. Frágilmente le pregunte

-¿Realmente estas bien?, tal vez no te conozca y no sepa absolutamente nada de ti, pero puedo asegurarte que esta no eres tú.

Ella me respondió agresivamente

-¿Qué vas a saber tú de mí? Solamente soy una chica que estaba en el momento justo cuando un idiota la necesitaba. Simplemente tú y yo no somos absolutamente nada.

Le respondí agresivamente

-¿Cómo puedes decir eso? ¡Dime que es lo que realmente está pasando contigo!

Ella me grito agresivamente

¡Esto no tiene nada que ver con Brayan o contigo! ¿De acuerdo Jul? ¡Ustedes son igual a mis bastardos padres!

Frustrado le grite

¿Realmente te vas a derrumbar por eso? ¿Por tus padres? Millones de personas sufren todos los días por no tener algo que comer, un padre al que abrazar o ni en sus sueños más locos los pudieron conocer ¡Deja de ser tan egoísta!

Ella rompió en llanto y me contesto con una voz quebrada

-¿Qué vas a saber tú de eso?

Agache la cabeza y respondí

-Cuando tenía 7 años mis padres se divorciaron, tenía que soportar noches de desvelo esperando a que mi padre llegara de la oficina ebrio con un sinfín de problemas mientras quería desquitarse con mi madre, aún recuerdo estar en la sala con un fuerte lleno de munición de zapatos para lanzárselos, recuerdo que me golpeaba hasta dejar marcas y a la mañana siguiente me decía que lo sentía y que me amaba, aún recuerdo la última vez que lo vi y le dije a los ojos, tu amor realmente duele.

Carina solto en llanto y dijo

-Por favor, discúlpame, sé que no soy perfecta y que posiblemente sea demasiado dañina para ustedes dos, todo lo que está en mi entorno tarde o temprano me abandona, simplemente estoy harta de mis padres y sobre todo de las estúpidas promesas.
En ese momento la mire a los ojos, tome una de sus manos y realmente pude ver las galaxias que albergaba su mirada y le dije

-Sabes, realmente tengo un dicho "Personas que rompen promesas, promesas que rompen personas". Toda mi vida me aleje de quienes las rompían, aunque hubo una que fue inevitable cumplir.

En ese momento Carina se acercó a mí y beso mi frente. En ese momento pude verla transparente de nuevo y pestañe un poco hasta que volví a verla normal. Después de eso volvimos con Brayan.
Brayan estaba sentado en la parada del tren, estaba cantando una especie de canción en lo que él hacía llamar inglés, pero parecía algún tipo de nuevo idioma para la humanidad. Brayan se levantó del asiendo y grito señalando

-Jul, Carina, ¡miren aquel cometa que vuela a lo lejos!

Carina y yo no lo podíamos creer, realmente había algo más que soledad en este maldito lugar, los tres acordamos ir hacia el cometa y nos pusimos en marcha para llegar al lugar de donde era bolado dicho cometa.

EL TRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora