Relatos cortos

Cada loco con su música

Hoy entré en mi clase. Todos mis compañeros tenían las narices pegadas a sus teléfonos. Me sentí un poco patética. Yo no tenía móvil y utilizaba el de mi madre para hablar.

Me acerqué a mi mejor amiga, una chica de mi estatura con el pelo y los ojos castaños. Meneaba la cabeza de un lado a otro. Tenía los auriculares puestos. Le toqué el hombro y esta se giró sin dejar de moverse.

-¿Qué escuchas?-pregunté.

-Justin es tan...

Hizo una mueca dando a entender que seguía prendada del cantante. Estaba enamorada de Justin Bieber.

La dejé, disfrutando. Me senté en mi sitio. A mi lado estaba otro amigo. Este, soltaba improperios con ritmo. Rapeaba. Me miró y entonó algunas palabrejas a toda velocidad en la cara. Yo me reí. Ese era el pan de cada día.

Detrás de mí, estaba una de mis compañeras. Escribía en un cuaderno mientras tarareba una canción de reggaeton. Me hizo un gesto con la mano a modo de saludo. Yo la correspondí y cada una volvió a sus cosas.

Todo eso me condujo a una conclusión.

Cada uno tení su propia música, su propio signo de identidad. Esas canciones les definían, decían quiénes eran. Y eso era lo que les hacía estar tan locos.