¿Qué pasa si te digo que hay un hombre con el poder de enamorar a cualquier persona solo por tu cuerpo?
Te presento a Eros, el dios primordial responsable de la atracción sexual, el amor y el sexo.
Él es capas de atraer a cualquier mujer, y a cualqu...
La ciudad estaba en un ambiente bastante animado. Faltaban un par de días para el festividad de navidad y realmente no sé en dónde la festejaré. Mi familia estará en Rusia, tal vez esperándome para celebrar juntos, pero yo me viene a Japón en busca de una mejor vida. Actualmente, trabajo como director general de una oficina de negocios, realmente me va de maravilla. Cuando término tarde la jornada, suelo ir a un bar cerca del trabajo. Si tengo suerte me llevo a una chica a mi apartamento, aunque cuando vuelvo al bar, suele ser molesto encontrarlas y que me pidan algo más.
Estoy en camino al dichoso bar, normalmente voy con unos compañeros del trabajo, quienes igual están solteros, pero esta vez voy sólo. El guardia ya me conoce, así que no hubo necesidad de dar algún tipo de soborno para entrar. Como de costumbre, fui a la barra a pedir un trago, y una vez atendido me acerque al escenario a ver a las dulzuras mover su cuerpo. Pero… algo llamó mi atención, más bien, algunas personas. Cuando salieron las bailarinas, a mi sorpresa, también salieron unos chicos, tres para ser exactos… Uno de ellos es alto y delgado, de tez morena, con el cabello negro al igual que sus ojos. Otro tiene el pelo rubio, algunos mechones cubren un lado de la cara y los ojos azul-verde. El último y el que más destacó entre los tres, tiene el pelo negro, corto, su peinado hacia atrás y ojos marrones. Era como si todas las miradas del lugar se fijaban en él. Las chicas comenzaron a no importarme. Pero… hubo un momento en el que me miró… sí, realmente me estaba mirando.
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En ese momento me sentí paralizado. No mostró ninguna sonrisa.¿Qué estaba pasando? Tan solo podía parpadear un par de veces, sentía una sensación algo electrificadas recorrer por mi cuerpo, como si el chico tuviera una clase de poder de controlar a la gente con su mirada... Acabada la coreografía, los bailarines bajaron y los tres chicos fueron a la barra.
»¿Cómo te llamas?«
Esa pregunta comenzó a flotar por mi mente. Tuve la necesidad de acercarme a los chicos y empezar un tema conversación. Realmente era una excusa para saber algo del azabache que me miró. — Me das otro trago.— Estaba justo a lado del chico rubio. Para mi mala suerte, quien me interesaba estaba entre los otros bailarines. Escuchaba las risas del moreno mientras los otros solo sonreían. No me atreví a mirar más. ¿Y si me descubren? + Disculpa… + Dijo una dulce voz a mis espaldas, sintiendo a la vez un toque en mi hombro, giré mi cabeza para saber quién era, vi que es una chica con la quien llegue a hacerlo en mi apartamento — Dime.— Contesté relajado. + Lo de la otra vez…+ Murmuró ella. Sabía que quería tocar ese tema, pero mi mala darte aumentaba, esta vez los chicos voltearon a ver la situación, menos el azabache, éste seguía concentrado en su bebida. — ¿Podemos hablarlo en otro lado?— me levanté del banco y la tomé del hombro para ir a un lugar mas "privado" y una vez llegado a su instancia, ella se sonrojó completamente.— Mira… — soy tan pésimo hombre que ni recuerdo el nombre de la chica.— Lo de aquella vez… ¿Puedes olvidarlo?— + ¿O-olvidarlo? + sus ojos comenzaron a tomar un tono oscuro, no como si fuera a llorar, si no como si estuviera decepcionada.+ ¿Acaso… no fui buena en la cama?+ Dijo sin vergüenza. — Linda… no estoy interesado en strippers.— le tuve que romper el corazón y ser directo. Cuando salí de ahí, claramente pegó un grito, tal vez de ira o tristeza, realmente no quería saber nada.
Dando un par de vueltas en el bar sin encontrar al chico, me di por vencido y salí del lugar para ir a mi apartamento. Segundos después escucho que le gritan a alguien. "Date prisa, Eros".
»Eros«
¿Cómo alguien se puede llamar así? Un empujón sentí en mi hombro. Un chico pasaba algo apurado… aquel chico... +Lo siento+ Volví a quedar inmovilizado, esta vez con solo su voz, como si esta logrará entrar en mi y recorres por mis venas, obligándolo mi cuerpo estar quieto. Eros le decían, el chico que me miró, el que me paralizó con tan solo una mirada…
¿Por qué diablos estoy pensando de esta manera tan sucia ahora? Mi brazo se estiró, como si quisiera detener al chico. » Espera«…
Me quede nuevamente paralizado… me sentía completamente como un inútil. Tan sencillo es acercarme a unas chicas, ¿Por qué es tan complicado acercarme a "Eros"?
