Cigarrillos o sexo.

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Zayn lleva meses con lo mismo, no importa como se lo pida o que haga, sigue fumando como jodida chimenea, se la pasa diciendo que es por ansiedad, la verdad no le creo ni una sola palabra, se mantiene todo el día ocupado y siempre estoy a su lado, incluso cuando logro quitarle su cajetilla y correr, o cuando está grabando, no se le nota ansioso para nada, creí que serviría mantenerlo ocupado, así que comenzamos a tener sexo cada que podíamos, tanto así que ya todos el estudio están acostumbrados sus gemidos, así de mal, y aún con éso, apenas se recupera del orgasmo y sale a fumar de nuevo. Me tiene hasta los huevos con éso.

Y justo por eso decidí que sería bueno darle un incentivo para que deje de hacerlo, y cada que no se acabe una cajetilla en un jodido día, ganará algo, ¿Qué va a ganar el grandioso Zayn Malik que no pueda simplemente comprar el mismo? Fácil, a mí. Me lo pensé mucho y cuando lo escuché hablando con Louis sobre como el sexo podía mover montañas, me decidí a hacerlo. Sobornaría a Zayn de la manera más vil del mundo, sexo a cambio de no destruir sus pulmones, me parece bastante justo.

Lo estaba buscando por todo el estudio y nada, fui a la sala de grabación, a la cafetería, a los baños, a la habitación de juegos, lo busqué hasta en el jardín, volví adentro y fui a la oficina de Simon, en la que hicimos la primera vez, recuerdo que fuimos baneados de ahí, así que ni siquiera me molesté en tocar. Me estaba comenzando a preocupar hasta que recordé el lugar al que iba mi bebé cuando sabía que iba a regañarlo, la azotea.

Ahí estaba, el hombre más sexy sobre la faz de la tierra (y era todo mío), estaba sentado mirando a la nada, con sus pequeñas piernitas abrazadas a su pecho y sus finos dedos marcando un ritmo algo flojo sobre ellas, sin nada entre sus labios se veía hermoso, es por eso que no creo que tenga ansiedad, porque cada que lo encuentro sólo, y cree que nadie está al rededor, no fuma, pasan horas y no lo hace, pero a penas notó mi presencia, tomó un cigarro y lo encendió. Era hora de llevar a cabo mi plan.

*Narra Zayn*

Cuando Liam llegó hasta mí y comenzó a sentarse yo ya estaba fumando, la verdad el sabor no era mi favorito y no encontraba la razón por la cuál la gente amaba éstas cosas, así es, no tengo ansiedad, fue sólo un cuento para que mi chico no estuviera molesto conmigo todo el tiempo, además algo mejor salió de ésa mentira, y fue que Li creyó que si teníamos sexo todo el puto tiempo yo dejaría de fumar, pero vamos, no había manera de que renunciara a lo mejor del mundo por tragarme mi orgullo, así que seguí fumando y por consecuencia, era follado por un jodido ángel cada cinco minutos, ganar-ganar.

- Bebé, ya basta sí? -dijo estirando la mano para quitarme el cigarrillo, y así comenzaba la mejor de las peleas, así que seguí con mi juego y me alejé de él recargándome hacia atrás sobre mis manos.

- No puedo Li -dije lo más inocente que pude mientras gateaba hacia él y me ponía sobre su regazo, aka mi lugar favorito, con las piernas a cada lado de sus caderas y mis manos descansando al rededor de su cuello.

- Claro que puedes Zee, sólo necesitas quererlo -aquí vamos, el juego era bueno pero tenía que soportar su sermón de padre, así que, para callarlo un poco, comencé a mover mis caderas de adelante hacia atrás sobre su entrepierna, soltando algunos jadeos porque joder, se siente tan bien, sentí sus fuertes manos rodear mis caderas pero, contrario a lo que creí, me sostuvo fuerte para impedir que me siguiera meciendo sobre él y me miró con cierto brillo en los ojos y una media sonrisa. Oh oh, creo que trama algo, me tensé al instante.

- Mira Zaynie, posiblemente creíste que no me daría cuenta de que te encanta la idea de fumar como loco sólo para que no salga de ti en todo el día, pero no estoy tan cegado por tus brillantes ojitos como te gustaría cielo -guiñó el ojo y yo no podía creer lo que estaba pasando cuando me bajó de su regazo y me dejó incado sobre mis talones frente a él, me quitó el cigarrillo y lo tiró por ahí- Desde ahora no tendrás ni un centímetro de mí si no dejas ése vicio tuyo -abrí excesivamente los ojos, ¿Ésto estaba en realidad sucediendo? El todo correcto Liam Payne me estaba...-¿Que si te estoy sobornando con sexo Z? Pues sí, lo estoy haciendo -no me la había visto venir- Así que te lo pongo así bebé, cigarrillos o sexo-.

- Debes estar jodiéndome Liam -negó con la cabeza- Bien, me importa una mierda que no cojas conmigo, no es como que lo necesite -dije poniéndome de pie, él copió mi acción- Veamos quién aguanta más.

Y con éso Li dio un paso hacia enfrente y puso su enorme mano sobre mi entrepierna e hizo presión sobre mí, un gemido salió de mi boca al mismo tiempo que me doblaba en dos y ponía mis manos sobre sus hombros, me tomó desprevenido es todo, él seguía tocándome sobre la ropa mientras pasaba su mano libre por mi cintura y hacía un poco de presión justo en las zonas adecuadas, soltaba jadeos al mismo tiempo que me perdía en sus caricias, me estremecí cuando se acercó a mi oído.

- Creo que no soy al que le va a costar más trabajo o sí bebé? -dijo con un tono burlón y se alejó de mí, dejándome rogando con la mirada, para después dar media vuelta y caminar hasta quedar fuera de mi rango de visión. Bien Liam, si así es como quieres jugar.... Te mostraré las reglas.



Baby please! Stop smoking.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora