Mi Pequeño Rival |AoKaga|

Única Parte

Su mundo cambio cuando le vio desde la primera vez jugar...

Sus ojos brillaban con más intensidad cada vez que lo veía saltar...

Su vista estaba puesta en él, cuando le miraba clavar la pelota...

El solo había vuelto al lugar del encuentro que habían tenido hace casi diez minutos, sólo porque había olvidado algo.

Quien diría que se ese algo lo haría toparse con su mas grande amor, además del Basket...

Ese estilo de Basket era diferente, era parecido al suyo, pero diferente, no se entendía ni a el mismo, pero tenía su toque, tenía ese "algo" que hacía que le dieran muchos escalofríos en su espina dorsal

- Es... - Las palabras de Aomine se callaron al verlo saltar desde la zona de tres, se quedó prácticamente sin palabras, casi juraba que su boca se abrió sola ante la sorpresa

"No llegará" Pensó de inmediato rodando levemente los ojos, pero sus palabras fueron calladas al verlo lanzar el balón y escuchar la bocina que indicaban el punto anotado, y que el segundo tiempo había terminado ahora tocaba el descansó

Su boca casi llegaba al suelo, ¡Clavo la pelota saltando desde la zona de tiros de tres y justo en el último segundo!

- ¡Bien hecho Kagami! - Se escuchó la voz de un grande chico de ojos y cabello castaño cuando bajo la mirada puedo ver el compañero palmeaba la espalda de aquel chico que lo había cautivado

"Así que se llama Kagami" Pensó, su corazón latía con fuerza guardó lo que olvido, y se recargo en el barandal mirando maravillado mas de lo que aquel chico de cabellos rojos podía hacer

Su labio temblaba, no podía creer lo que sus ojos veían, el chico jugaba espectacular

- Aomine-kun - Fue la voz que resonó detrás de Daiki, el moreno brinco asustado desde donde se encuentran nteaba mirando detrás de el

- ¡Ah! ¡T...Te-Tetsu! ¿Que haces aquí? ¡Ya encontré lo que buscaba, anda vámonos! - Lo jalo de la muñeca pero el de cabellos celestes dirigió su vista hacía abajo, exactamente donde su luz veía antes de asustarlo

Se encontró con un enorme chico de preparatoria de cabello y ojos rojos intenso que bebía una botella de agua

- Seirin - Leyó las letras en su dorsal hacia el frente junto al número - Diez - Esta vez miro a su mejor amigo - ¿Acaso te gusta?

- ¡Wa! ¡Tetsu! ¿¡Que tonterías dices!? No lo conozco, ¿Porque debería gustarme? - Fruncio el ceño de mala gana mirando con asco al de cabellos rojos - Además, el es un chico - El aun con falta de desarrolló Aomine trato de excusarse

- Porque lo mirabas como si fuera un ángel, y... Aomine-kun, le recomiendo que se limpie la baba - Kuroko se río un poco mientras le extendía un pañuelo

El sonrojo literalmente explotó en las mejillas de Aomine mirándose avergonzado, tomo aquel objeto

- Te esperó afuera, te doy cinco minutos ante de que Akashi-kun se enoje, te daré mas tiempo si puedo - Le susurro al oído, y el fantasma se dio vuelta

- Eres el mejor Tetsu - Casi lo besaba, pero no, tampoco era para tanto el debía mantener la postura, su mirada de nuevo bajo a la cancha donde el pelirrojo corría de un lado al otro con aquel balón en su mano botando contra el suelo - Quizá... Si me gusta...

(...)

Kagami tenía mucho tiempo sintiéndose observado, pero no era algo que el consideraba que entraba dentro de lo normal