∞ Capítulo único ∞

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Desde que Jeon Jungkook tenía memoria había tenido una leve obsesión por la leyenda de "Kuchisake-Otoko", y que su familia se mudara a Japón sólo hacía que su interés, sobre ese mito urbano, creciera.

"En la antigüedad existía un hombre muy guapo que, apesar de haber contraído matrimonio, seguía teniendo encuentros sexuales con cualquiera que le reafirmara lo hermoso que era.

Cierto día, en un ataque de celos, su mujer le cortó la boca de lado a lado mientras gritaba:

-¿¡Ahora piensas que eres hermoso!?

Luego de eso, el hombre murió en el piso por desangramiento. Se convirtió en un Yōkai, espíritu demoníaco que se encarga de cobrar venganza con cada ciudadano que se cruzara en su camino."

A pesar de que Jungkook era demasiado inteligente, no podía evitar creer completamente en aquel mito. A pesar de estar fascinado con aquella historia, aún no se sentía capaz de crear instancias que lo hicieran estar frente a esa criatura y comprobar, en persona, si éste era real o no.

Fue sólo hace tres semanas atrás que Jungkook inventaba excusas a sus padres para salir por la noche, ir a jugar videojuegos o simplemente ir a un bar para despejarse de todo el esfuerzo, que significaba ser un estudiante como Jeon, eran algunas de ellas.

Había leído miles de veces todas las precauciones que se tenían que tomar para escapar de las garras del espíritu y es por eso que siempre llevaba dulces con él, además de tener preparadas las preguntas que lo confundiran en el caso de necesitar escapar.

Jeon sabía que el camino más corto para regresar a su casa se tenía que hacer por un callejón; para él era muy común recorrerlo, ya que era su rutina desde hace unos días. En el lugar no se encontraban borrachos, ni mucho menos bandas que lo único que buscaban era generar daño, de hecho, en el lugar no se encontraba nada.

Jungkook caminaba tarareando una canción, un hábito que tenía cada vez que se encontraba solo para hacerse un poco de compañía. No supo si el humo que empezaba a salir desde las esquinas del callejón eran producto de su imaginación, a causa de miedo, o de verdad estaba ocurriendo. Faltaba muy poco para atravesar completamente la angosta calle, por lo que empezó a acelerar el paso.

Cuando estaba a punto de cantar victoria, una respiración cerca de su cuello lo hizo parar en seco. Podía sentir la presencia de alguien más tras él, pero no podía darse la vuelta, no quería darse la vuelta.

A pesar de que quería salir huyendo, sus músculos no le respondían. Tenía tras él la oportunidad de conocer a la figura que lo traía como loco, por conocer, más desde hace un año.

Con lentitud comenzó a girar y ante sus ojos apareció un muchacho con cabello rosado y con mechones que caían rebeldes sobre su cara; tenía su boca y nariz cubiertas por una mascarilla quirúrgica que sólo dejaban a la vista unos bonitos ojos pequeños color café.

Sólo miró el rostro del chico frente a él, no se dio cuenta de que en una de sus manos traía una gran tijera. No, Jungkook sólo estaba preocupado de no perder algún detalle de esa cara perfecta.

- Watashi kirei? (¿Soy hermoso?)

Su voz.
Esa voz.
Era la más dulce y aguda que había escuchado jamás.
Jungkook tragó duro y su voz sonó un poco ronca.

-Sí.

El chico frente a él se quitó se mascarilla; dejando ver su boca cortada, sin duda, eso no se veía lindo para una persona normal.

Y eso era lo mejor de Jungkook; él no era normal.

Jeon miraba fascinado las marcas rojizas de ambos lados de la boca del chico. Lejos de parecerle horrible, lo único que pensaba era que eso lo hacía único y misterioso.

- Kore demodesu ka? (¿Y ahora?)

-Sí.- respondió sin dudar ni un poco.

El espectro se sintió confundido; las personas comúnmente lo miraban con terror y respondían a bases de titubeos, pero el chico castaño frente a él era todo lo contrario. Levantó su mano para mostrar sus tijeras esperando causar miedo, pero la mirada brillante del chico no cambiaba.

-Eres hermoso.- volvió a repetir Jungkook mientras comenzaba a avanzar hacia él con la intención de tocar su rostro.

-Tu nombre...

-Jeon Jungkook.- respondió tocando la cara del espíritu; su piel estaba helada.

-Jimin...

"Jimin" ése era el nombre del guapo chico frente a él que, a pesar de su cara cortada, seguía con una belleza impresionante.

-Vete...- susurró Jimin. No quería matar al chico de manos cálidas, no podía ser el causante de la muerte de un ser tan maravilloso como él. Pero Jungkook no se movió hasta que el sonido de una patrulla interrumpió el momento.










Jungkook se alejó de Jimin con la promesa de que volvería al otro día.








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Hola, bueno les traje una adaptación del oneshot "Kuchisake-Otoko".

Lo leí y quedé encantada con el oneshot, pues mi leyenda urbana favorita de Japón es Kuchisake-Onna.

Está más que claro que esto está basado con su leyenda.

Muchas gracias a @EsposadeMin_Suga por dejarme hacer una adaptación de su obra. ❤

Espero les haya gustado y la apoyen.

Por cierto, ya seguiré con 'Adoptado a los 17'. Subiré capítulo más tarde.

Sayonara~ 💜

Kuchisake-Otoko (KOOKMIN OS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora