Save me © - Simbar [Pausada]

CAPÍTULO 5: Después del open, te quiero a mil metros de mí

Hola amoress, bueno hoy les haré la maratón ya que mañana no me voy a conectar*-* Les dejaré tres capítulos*-* Espero que les guste, gracias por leer la fic❤️

[1/3]😍💏❤️

SIMÓN POV

Entré por la puerta trasera sin hacer el mayor ruido cuando de repente escucho unos gritos, y era una voz conocida, era Ámbar ¿pero con quien discutía de esa manera? Me acerqué un poco y me escondí detrás de un sofá, y pude escuchar las atrocidades que les decía Sharon a Ámbar...

-Ámbar no quiero que andés escuchando conversaciones ajenas ¿ok?

-¿Conversaciones ajenas? ¿Cuándo?

-Anoche cuando hablaba con tu abuelo

-No escuché nada madrina

-Sí que lo escuchaste y te obligo a que lo olvidés ¿me entendés?

-Lo que escuché fue claro ¿Qué es eso de que yo tengo que saber la verdad sobre mis papás?

-Tus papás están viajando y lo sabés

-Tanto viajan y ni siquiera me dicen feliz cumpleaños ni siquiera vienen para Navidad ni Año nuevo –dice Ámbar casi llorando

-¡No te pongás a llorar!

-¿Y si lloro qué? ¿Acaso me vas a decir de nuevo que soy una perdedora y que nadie me puede querer? -gritando

-Y si pues te lo digo, sos una incompetente Ámbar, no me da orgullo que seas mi ahijada, te críe como una persona de bien y mira en lo que te has convertido, en una chica débil y sin fuerzas, me decepcionás Ámbar, permiso me voy a dormir, tanto escándalo me dio jaqueca –se va a su habitación

Cuando veo a Ámbar llorando, neta que me da ganas de abrazarla y protegerla y decirle que yo estoy ahí con ella, ahora entiendo porque es así, solo necesita algo tan simple y lindo como es el amor, pero siento que si la abrazo me va a rechazar y no va a querer verme más. Pero en fin, decido salir de mi escondite, ella estaba de espalda llorando.

-Ámbar –le digo con pena

-¡Ay! ¡Me asustaste! ¿Qué hacés acá? –limpiándose las lágrimas rápidamente

-¿Estuviste llorando?

-No, Simón, por favor, una ganadora no llora, no sé qué es eso. Me dio alergia a los ojos ¿acaso no te ha dado? –mintiéndome

-Ya Ámbar, escuché todo lo que tu madrina te dijo, no tienes que fingir nada y tranquila, si quieres postergamos el ensayo para mañana

-No, Simón, esperá, mira todo lo que escuchaste, olvidáte ¿ok?

-¿Cómo lo voy a olvidar? Ámbar ¿neta que aguantas a tu madrina? ¿No ves cómo te trata?

-No es tu asunto ¿ok?

-Es que si lo es y me preocupo

Al decirle eso, me queda mirando con tristeza y comienza a llorar de nuevo, en eso me conmuevo y la abrazo, aunque me pegue, pero la abrazo con todas mis fuerzas

-¿Qué hacés? –me dice con su cuerpo medio tenso, por el abrazo

-Te abrazo, ¿sabías que con 7 abrazos al día ya eres feliz? –le dije con una sonrisa

Con el abrazo, Ámbar se demoró en correspondérmelo, pero lo hizo y comenzó a llorar más. Me dolía verla así y ni yo sabía porque, pero me dolía el alma, neta que con ese abrazo sentí una electricidad por todo mi cuerpo, sentí como si estuviera en las nubes, no la quería soltar, no quería ¿Qué me pasa?