Cupido Enamorado

831 131 48
                                    


— SungGyu, rompamos.

Ante esas palabras Nam sólo pudo sonreír desde su sitio, porque llevaba esperando bastante tiempo escuchar eso por parte de la pareja de aquel chico de ojos pequeños. 

— ¡De nuevo!—saltó ante ese grito, y se levantó rápidamente del suelo tapando la boca de SungYeol. Sus superiores pronto llegarían, si lo descubrían observando a un humano asignado fuera de horario lo castigarían, no quería éso.

El trabaja para Cupido, junto a otros seres de ese lugar casi parecido al paraíso, excepto por los regaños y castigos. La gente siempre había idealizado a tal ser encargado del amor como un bebé con alas en pañales con arco y flecha, pero era más que eso.  En ese lugar de "ángeles" todos cumplían un deber para mantener el orden del amor y relaciones en la tierra. Nam junto a SungYeol y otros, se encargaban de unas cuantas personas, por lo que debían estar pendientes de sus relaciones amorosas, desde enamorarse hasta decepciones e ilusiones, porque así se manejaba ese mundo. Desde hace un tiempo atrás Nam no realizaba bien su trabajo, porque había cometido un error, se había enamorado de uno de sus encargados: Kim SungGyu.

No sabía cómo había sucedido,  lo primero que pudo hacer es negarse a si mismo aquel sentimiento del que se encargaba en los humanos. Howon, uno de los superiores, le había contado algunas historias sobre los "Cupidos" que habían pasado por enamoramientos con humanos, no era algo bueno de contar en realidad, además el amaba el lugar en donde estaba, dormía, comía, se divertía, no podía pedir nada más, pero era inevitable sentir esa atracción tan fuerte ¿Por qué a Cupido se le prohibía enamorarse si se encargaba del amor?

 SungGyu podía parecer normal, para WooHyun no era así, desde el primer día que había visto a ese chico algo había  hecho "clic" en su interior. No era su primer humano a cargo, por ello WooHyun sabía que el sentimiento que tenía era distinto, no el típico "angel-designado". SungGyu le fue asignado luego de una decepción amorosa. Le había sorprendido lo fuerte que aquel chico se había comportado, por lo general los humanos tendían a ser más sentimentales, pero ese chico se mostró fuerte a pesar que Nam sabía más que bien que el otro quería llorar, poco a poco fue conociendo más a aquel chico desde ese paraíso donde tan solo podía observar.

Entonces pasó...

Por primera vez WooHyun había intervenido cuando no debía, la primera vez que había faltado a una de las reglas: "No se puede intervenir en contra del amor si no está en su destino". Pero él lo hizo, porque de un modo u otro aquella relación de Kim SungGyu le desagradaba. Pero la situación se repitió una y otra vez, le dolía ser el causante de la tristeza de quien amaba, pero los celos que le carcomían ante los pretendientes de SungGyu eran inevitables. 

— ¡Te voy a matar, Nam!— WooHyun soltó bruscamente a SungYeol sólo para terminar usándolo de escudo. Howon era una buena persona que enojado era completamente otro, y sumamente estricto, aun así no se arrepentía había logrado separar a SungGyu de su supuesto amor, eso lo valía. Porque llevaba demasiado tiempo enamorado de alguien totalmente terrenal e imposible... El se preguntaba internamente si no podía haber cosa más injusta que esa...

¿Era un mal ángel Cupido? Lo era pero todo en nombre del amor ¿No? 

— Mira esta situación no va más, SungGyu dejará de ser tu designado desde hoy.

— ¿¡Qué!? No puedes hacerme eso, no tienes derecho—en otra ocasión escucharía con atención a su superior, pero el hecho de que su  decisión lo alejara de quien le importaba realmente le molestaba.

— ¡Claro que lo tengo! Y es lo mejor. 

WooHyun tragó con algo de dificultad y sólo asintió, el mayor en grado sólo dio la vuelta y se dirigió a la salida, sin decir nada más, ya lo había decidido.

Cupido enamorado [WooGyu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora