Cap.5

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Harry

- Está bien, pero que sepa, que su chiste no ha tenido gracia - en realidad si lo tuvo, era absurdo e insultante pero sabía que no lo había hecho con mala intención.
Snape levantó su enorme túnica y se acercó a mí, pensé que eso sería raro e incómodo pero no me aparté, me encogí y me acurruqué a su lado, su pelo húmedo me cayó sobre mi cabeza, era agradable notarlo, me sentí raro, y creo que él también, estaba tenso pero noté como poco a poco se relajaba.

- Siento mi comportamiento profesor, y siento haberle interrumpido su noche.

- Oh no, jaja no se preocupe, si no hubiese sido por usted me hubiera pasado la noche haciendo un inventario de pociones. - me respondió con una sonrisa en los labios

- No entiendo por qué siempre es usted tan serio, me gusta verlo sonreír, debería hacerlo mas a menudo. - pero creo que no debí decir eso, pues su sonrisa desapareció.

- Las cosas no son tan fáciles Señor Potter, siempre hay un pasado muy presente. - sus ojos se volvieron oscuros y su respiración se aceleró.

- Le entiendo profesor, pero hay que olvidar aquello que nos hizo daño una vez y más si ya no está presente. - no sabía a qué se refería, pero quizá eso le ayudara

- Usted no lo entiende, pero algún día lo hará y lo verá todo más claro. - las lágrimas rodaban por su mejilla, ¿que le pasaba a todo el mundo? Eran tiempos oscuros, si , pero no sabía que tanto y no soportaba ver a las personas que me rodeaban, llorando.

-¿Confía en mí Snape?

- Es tan impredecible Señor Potter, que a veces me asusta que pueda hacer.

- Eso es un sí, espere aquí, ni se le ocurra moverse, ni un solo músculo.

Corrí tanto como pude, hasta llegar a la puerta de atrás de Hogwarts, por suerte aún estaba abierta, pero no por mucho tiempo, corrí lo más que pude intentados ser discreto hasta llegar a mi habitación, me agaché delante de mi cama y saqué la escoba, salí de nuevo por la puerta trasera y me monté en la escoba en dirección al campo.

-¡Profesor! - Dije desde el aire.

Snape se levantó y con el pulgar derecho se limpió las lágrima.

- ¿ Que hace ahí montado Potter?

- ¿ Ha montado usted en escoba alguna vez? - le pregunté haciendo círculos imaginarios  alrededor de él con la escoba.

- Si... Pero nunca fui muy bueno en ello - solté una risa, me acerqué a él y le tendí la mano.

- Oh...no, no no no - replicó resignándose

- Oh...si, si si si - le remelé yo - si se sube, le cuento por que hago esto

Me pareció ver una sonrisita en su cara, asi que nuevamente le tendí la mano y me la agarró con fuerza mientras tiraba de él para ayudarlo a subir.

- Las manos en mí cintura, pero sin apretar eee...

- Vale vale - dijo con una carcajada mientras me rodeaba con los brazos.

Subimos y subimos hasta poder ver a lo lejos todo Hogwarts. Empecé a coger velocidad y el aire nos golpeaba prácticamente en la cara.

- ¿y cual es su historia Potter? - me gritó para poder oírle bien.

- Pues... Yo poco sabía del quidditch, solo un poco, lo que me había contado Draco una vez, nunca pensé que me fuese a gustar, pensaba que sería incómodo y peligroso, hasta que el señorito Malfoy me retó en primer curso. Me gusta montarme en la escoba y ser yo quien la maneja, siento libertad, siento que soy el dueño y que nadie puede controlarme aquí arriba, la manera en la que el aire frío te recorre es maravillosa, me siento libre de cualquier cosa, aquí montado solo tengo un pensamiento y es: “No pensar nada" ¡y lo consigo! Me olvido de los problemas, de que me pueden matar en cualquier momento, de que tengo una parte de mi familia muerta y la otra me odia, que mi profesor de pociones; que dentro de poco dejará de serlo, me tiene cierta pelusilla y que todos los mortífagos y Slytherins me odian a más no poder...
Esa es mi historia.

- No hay luz sin oscuridad Potter, no la hay...

Sus manos me apretaron con suavidad y supe a ciencia cierta que para él, esa frase le marcaba mucho.
Descendimos después de un paseo en escoba muy agradable. Al llegar al campo de nuevo, Snape se acostó encima de la arena y se rió a carcajadas.

- Y después de años, me monto en una escoba con un alumno que me pilla semidesnudo y me da la mejor noche después de tanto tiempo...

- Eso ha sido un alago profesor Snape y agradezco que haya escuchado mi penosa historia, espero que algún día me cuente usted la suya, ahora debería irme.

- Si...yo esperaré a recuperarme - soltó y dejó caer los brazos extendidos a sus lados.

Cogí mi escoba con una mano y me eché al hombro la túnica y salí por la puerta. Caminé rápido hasta que unas pisadas tras de mí me paralizaron y dejé caer la escoba. Me di la vuelta y busqué mi varita  en la túnica hasta que me di cuenta que la habia dejado encima de la cama.
Mierda, estaba en un problema.

- ¿Profesor? - pregunté esperando la respuesta de "dígame señor Potter"
Pero no respondió.
Me empecé a asustar mucho y eché a correr hasta llegar al enorme castillo, corrí por los pasillos hasta el baño y me encerré allí esperando a que aquella persona no me hubiese seguido.

[Drarry] Por Tu Bien...(En Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora