en su apartamento

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Cuando por fin entramos en su apartamento, nos dimos cuenta que tenia el toque que ella siempre le da a sus cosas, fue como entrar en una catacumba que te invita a estar hay.

Kathe llevó a Roman a su alcoba y lo dejo para que el se acomodara a su gusto, luego me preguntó si quería ver la alcoba o salir a dar un paseo, adivinen que elegí... Exacto, un paseo al lado de mi amada Kathe, esas son cosas que jamas van a tener reemplazo.

Decidimos ir a la plaza mas cercana, extrañamente llamada cha gun rohb, según el idioma natal de Polonia, significa donde nace el amor, nos miramos y sonreímos, fue como si esa fuera nuestra primera vez, ella me estaba hablando y yo no pronuncie ni una sola palabra, me encanta oírla hablar y detallar cada gesto cada parte de su cara, es así como siempre voy a recordarla. 

Mas tarde al llegar a su apartamento, fuimos directo a su alcoba, necesitábamos tener sexo, queriamos volver a juntar nuestras pieles, y es así como comenzaron 4 largas horas de sexo, disfrutando sus orgasmos y gemidos además de sus espectaculares movimientos.

Estando en nuestro momento de reencuentro carnal, suena el timbre del apartamento, Roman pregunta(quien es). Nadie responde. Pongo el pantalón y salgo a ver que sucede, pregunto una vez mas quien es y no responden.

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