Because I Love you (One Shot)

Because I Love You

Tras la muerte de Isabella, Edward estaba siendo consumido por la tristeza y depresión de perder a quien más amaba, las cosas no estaban siendo como Oswald había planeado, ya que no le daba la instancia de acercarse, siendo quien lo pueda consolar, Nygma solo se quedaba acostado sin ganas de nada, no quería hablar con nadie, ni seguir sus trabajos para el alcalde de la ciudad de Gotham.

Cobblepot no podía soportar  verlo de esa manera, así que tendría que actuar tratando de subir el animo de su mejor amigo. Llegó hasta una de las habitaciones de su mansión, cual ahora le pertenecía a su querido Ed, dónde simplemente entró

—¿que quieres?— cuestionó a la defensiva a pesar de que no sabía nada lo que su mejor amigo había provocado, de lo que sus pensamientos distorsionados lo llevaron a hacer, ya que detrás de ese villano que era capaz de traicionar a quién sea, en el fondo de esa persona egoísta que se había transformado a quién no le importa nadie más que si mismo luego de las muertes de sus padres, existía un corazón con la capacidad de amar, y ese amor era únicamente para Edward, por lo que no podía permitir que alguien más tomara su lugar es por eso que tuvo que deshacerse de Isabella. 

—No soporto verte así, en serio, tu me ayudaste cuando yo estaba perdido, ahora déjame ayudarte, recordarte con las palabras que tu mismo me dijiste, tras la muerte de Kristen... ella después de todo era tu debilidad, no podías permitir que alguien más lo sea, o más bien alguien como ella, que no es capaz de cuidarse a si misma... Ed tal vez la persona indicada para ti nunca fue ella... — exclamó, algunas cosas le hacían sentido pero otras no

—¡ella era el amor de mi vida!—  alzó la voz Nygma, luego soltó un suspiro y se quedaron en un silencio, fue cuando Oswald aprovechó de sentarse al lado de la cama de su amado, para brindarle un abrazo, quizás en ese momento las palabras estaban de más, solamente un gesto lo haría saber que estaba con él y lo apoyaba en todo, omitiendo la parte que fue él quien mandó a eliminar a Isabella.

Pasaron unos segundos y finalmente se soltaron de ese abrazo, pero seguían muy cerca. El alcalde de Gotham acarició el rostro del antiguo ayudante forense  del GCPD

—gracias por confiar en mi— exclamó el dueño de casa, haciendo que el invitado en su mansión alce la vista conectando miradas, fue entonces que se quedó paralizado unos segundos tras verlo en esa forma tan tentadora, moría por besarle, pero aún ni si quiera era capaz de confesar sus sentimientos por él 

—¿te vas a quedar mirando ahí toda la noche?— cuestionó, él movió la cabeza en forma de negación, cerrando los ojos, para levantarse, e irse a su habitación, antes de hacer algo que se pueda arrepentir después, sin embargo Nygma lo interrumpe antes de que alcanzara a llegar a la puerta —quédate un rato más— susurró, aquello hizo que un cosquilleo mezclado con nerviosismo recorriera todo el cuerpo de Cobblepot.

Caminó nuevamente a sentarse al lado de su amado, con sus característicos pasos, lo miró y solamente le dedicó una sonrisa, realmente no sabía que decir, estaba muy nervioso 

—Gracias por todo lo que haces por mi— susurró Nygma   

—créeme que todo lo que hago, es  porque quiero verte bien, ¿de verdad no te parece maravilloso, Tú, y yo juntos dominando Gotham? solo imagina todo lo que podemos lograr, juntos... solo piensa y dime si no te gustaría— exclamó  logrando persuadir en él, los sentimientos de Nygma hacia Cobblepot, estaba confundido, su amor era totalmente para Isabella, pero por otra parte se sentía tentado por Oswald y eso le molestaba a si mismo

—Claro que me gustaría dominar Gotham junto a ti, pero... primero debo superar lo de Isabella... ya sabes todo es tan reciente, que...— no pudo continuar de hablar, decía algo e iba a llorar, algo que no se veía bien en un villano, por lo que solo guardó silencio y pestañeó reiteradas veces para evitar dejar salir las lagrimas, el Pingüino le ofreció una sonrisa nuevamente, una sonrisa que le hacía entender que todo estaría bien, más entender le hacía creerlo, entonces encontraba consuelo por unos segundos.