A la noche se piensa, se piensa mucho.
Como si tu cerebro decidiera escupir todos pensamientos solo y porque si, pero en todos los sentidos de la palabra pensamiento.
Sea para escribir, sea para pensar, sea para hablar, sea para no dormir.
Todo, en ese momento, y por qué?
Estoy segura que alguna explicación lógica, psicológica y coherente debe haber, pero en lo que a mí concierne es que en la soledad de la noche (sobretodo para a los que nos gusta hablar y mucho), nos obliga a tener conversaciones con uno mismo, incluso esas que venimos esquivando hace un rato, incluso esas que te daría cosa escucharlas de alguien más pero que sabemos muy bien que las tenemos.
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Textos, mis textos.
Teen FictionPero también pueden ser tuyos si así lo sentis. Capaz por ahí suba cosas de otras personas, pero lo voy a especificar al principio.
