delirios

la mesa

Estaba esperándolo con un  lindo vestido al cuerpo de color rojo, tacones negros y mis labios combinaban con el hermoso vestido, mi pelo suelto y ondulado con mi mejor perfume. llevaba desde las ocho de la tarde arreglándome solo por qué hoy era nuestro aniversario de matrimonio el salía alas ocho y treinta del trabajo, tenía la mesa ordenada así como toda la casa estaba lista para celebrar nuestros cincos años de matrimonio, pero el destino y la vida no es un cuento al cual relatar con creces pasaron las horas y el nunca llegó me tomé todo el vino y terminé con una botella de vodka ya sola y desolada y ya ni tan arreglada salí ala calle tome el primer taxi que encontré y le dije lleveme ala mejor discoteca ya ebria el conductor me miró divertido se notaba que era un hombre de nomás de treinta y seis años. al bajarme del automóvil ya me sentía bastante mariada le pagué al conductor y entre ala famosa discoteca no venía desde mis diciciete años , la llamaban el tambor por aquel ruidoso y molesto ruido  que provoca la música. entre y me fui ala barra pedí con toda torpeza un vaso de whisky y me gire y lo único que ví fue a mi esposo besandose con mi compañera de oficina.