Sasuke...
Cualquiera diría que esta historia es igual a muchas otras que han leído por ahí, llena de felicidad, amor y un sin fin de sucesos hermosos en la vida cotidiana de sus protagonistas, pero déjenme decirles que esta historia no es del todo bella, empezando por mi.
¿Porque? se preguntaran ustedes, pues verán, esta historia se trata de mi vida y de cómo e tenido que sobrellevar una maldición la cual a estado en mi familia desde varias generaciones atrás pero que para mi mala suerte e ido yo el más perjudicado.
Mi nombre es Sasuke Uchiha, doncel, hijo menor de Fugaku y Mikoto Uchiha, tengo un hermano mayor llamado Itachi Uchiha pero él no vive con nosotros, está de viaje en el extranjero debido a su trabajo de modelo ya que, para su suerte, él es completamente perfecto físicamente, no como yo que e tenido que vivir escondido prácticamente toda mi vida producto de lo espantoso que es mi rostro.
Para explicar mi condición, viajaremos al pasado donde mis "adorados" ancestros son los culpables de todo.
Hace mucho tiempo mi tatara tatara tratara abuelo, Indra Uchiha, tuvo un romance clandestino con un sirviente doncel que trabajaba para la familia, se habían prometido amor eterno, pero para la mala suerte del doncel, Indra solo jugaba con él para satisfacerse sexualmente.
Un día el padre de Indra, Hagoromo Uchiha, dió la gran noticia a la familia de que Indra contraerá matrimonio con una bella mujer de sangre azul, siendo así una unión satisfactoria ya que siendo de la misma clase social, harían que la descendencia fuera aún mejor.
El sirviente, que estaba presente y pudo oír todo lo que estaba sucediendo, salió de la mansión corriendo y llorando por todo el engaño al que fue sometido, corrió tanto hasta llegar a un barranco y aún con lágrimas en sus ojos y con un hijo de Indra en su vientre, se tiró al vacío para así despedirse de este mundo tan cruel.
La madre del doncel, quien era una malvada bruja, furiosa y llena de dolor fue hasta la mansión durante una noche de tormenta y maldijo a la familia en especial a Indra por haber engañado a su hijo.
La maldición consiste en que el próximo descendiente que nazca en la familia siendo doncel, nacerá con cara de puerco y éste no podrá deshacerse de su maldición hasta que alguien de su misma estirpe lo ame tal cual es.
Toda la familia no le dió mucha importancia a aquella maldición ya que para su suerte todas las generaciones habían tenido hijos varones y éstos habían tenido más hijos varones y así sucesivamente, hasta que después de varias generaciones por fin había nacido un doncel en la familia.
Para sorpresa de todos este no tenía cara de puerco por lo que ahí se dieron cuenta de que aquella maldición solo había sido para asustar a la familia nada más, o es lo que pensaban, ya que lo que no sabían era que ese doncel que había nacido era producto de una infidelidad que nunca salió a la luz y por eso la maldición no afectó a ese pequeño doncel.
Pero si afectó a mis padres ya que ellos con la ilusión de recibir a un nuevo integrante en la familia, estaban más que felices hasta el día en que nací y que se dieron cuenta de que tenía cara de puerco poniendo histéricos a mis padres quienes de verdad pensaron que la maldición había acabado, pero todas sus pesadillas se hacían realidad con mi nacimiento.
Intentaron por todo los medios de deshacerse de mi nariz y orejas de puerco, pero para mí mala suerte, era imposible quitarlas con una cirugía ya que, según los médicos, varios vasos sanguíneos y nervios de vital importancia pasaban justo por en medio de estos imposibilitado la extracción.
Acongojados, mis padres salieron del hospital conmigo en brazos tratando de alejar a los molestos periodistas que estaban más que ansiosos por fotografiar al nuevo integrante de la familia Uchiha, pero que por nada del mundo dejarían hacer algo así.
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La Maldición de Sasuke
FanfictionSasuke Uchiha pertenece a una acaudalada familia sobre la que pesa una maldición: su nariz, igual al hocico de un cerdo, es una prueba de ello. La única esperanza de que la maldición se rompa consiste en que alguien se enamore de él, aceptándolo tal...