Este día me desperté con el mejor de los ánimos.
Me alegré ver a Antonio sentado en la mesa, nos acompañaría a desayunar.
Me acerqué y lo abrase fuerte, su sonrisa era tan vibrante, no quise preocuparme al verlo cansado y con ojeras, Antonio odiaba que lo tratáramos como pétalos de flores.
Me senté a la par de Bruno, Clarissa bebía su café pero sus ojos estaban pendientes de Antonio.
- ¿y tú adorada Julieta? - mi esposo miró a Antonio.
El nos devolvió la mirada acompañado de una sonrisa.
- no bajará, se acostó molesta contigo mi dulce Greta - deje mi vaso de jugó y miraba interrogante a Antonio.
- creo hermano que les arruinaste el plan de fastidiar a Greta, al cederle tu puesto en la mesa.
Bruno soltó una carcajada y Clarissa me dirigió una sonrisa.
-¿Cómo sabes lo que pasó si no estabas con nosotros? - pregunté extrañada, mi esposo tomó mi mano y la besó.
- por las cámaras - fruncí el ceño al recordar que una vez don Fernando se puso paranoico con tantos robos que hubieron en la zona, había instalado cámaras por toda la casa y estas eran controladas por los guardas de seguridad.
- pensé las habían quitado- murmuré.
Antonio y Bruno negaron con la cabeza.
- no quise quitarlas querida, él las puso por miedo a que nos pasará algo y así los guardas estarían pendientes, aunque ahora tu puedes hacer los cambios que desees y las puedes quitar si quieres privacidad - me comentó Clarissa.
Le sonreí, la verdad no quería quitarlas veía que Antonio se divertía viéndolas.
- no te preocupes Clarissa, ¿pero igual como lo ves?
Antonio sacó su móvil y entró a un programa donde él podía ver lo que las cámaras grababan.
- pura tecnología mi dulce Greta.
Le sonreí.
- ¿te molesto la actitud de Julieta? - Clarissa observaba a su hijo.
Antonio se quedó pensativo.
- sabes que nunca ha sido así, pienso que ella se porta así por el bebé - Clarissa asintió - y lo malo es que se está uniendo con Carmen, ya le advertí que si insistía en molestar a Greta se tendría que marchar de esta casa.
Bruno me apretó la mano.
-esperó lo haga Antonio porque no quiero intervenir.
- puedo cuidarme sola - murmuré
- no lo dudó Greta pero no quiero que te estén importunando, ellas son mujeres adultas que están portándose como niñas.
Antonio asintió.
-¿cómo te sientes hoy Antonio?- pregunté.
- mejor que ayer.
- revisé el reporte meteorológico y hoy será una noche agradable.
Los tres me miraban interrogante.
- hoy cumpliremos uno de tus deseos - acamparemos bajó las estrellas - vi la emoción de Antonio- ya le pedí a Jacinto que buscarán las casas de campañas, linternas, y en la cocina pedí que nos prepararán bocadillos.
Antonio aplaudió como un niño pequeño, mire a Clarissa observar a su hijo con nostalgia y tristeza, lágrimas recorrían su rostro.
- lo lamento - quiso levantarse pero Antonio la detuvo, lo vi acercarse a su madre y tomarla entre sus brazos - no puedo aceptarlo, antes lo que ustedes necesitaban su padre y yo se los podíamos dar, si les dolía algo con una pastilla que les daba se les quitaba - Clarissa tenía el rostro empapado en lágrimas - me siento impotente al no poder hacer algo por ti mi amor, quisiera ser yo la que estuviera en tu lugar - Antonio la calló poniendo su dedo en sus labios.
- has sido la mejor madre del mundo, y créeme que prefiero ser yo quien cargue esta enfermedad y no tú madre- ambos lloraban y cuando sentí los dedos de Bruno limpiar mis mejillas me percaté que yo también lloraba.
- haz tu vida madre, tienes derecho a ser feliz- Clarissa levantó el rostro y lo vio a los ojos.
- no entiendo - pasaba sus dedos por sus mejillas.
- sé que en tu soledad desde que murió papá, te has sentido atraída por Jacinto.
Abrí la boca sorprendida y miré a Clarissa que los veía con culpabilidad.
- perdónenme les juró que he sido fiel a la memoria de su padre.
Mi esposo se levantó y la abrazó.
- lo sabemos madre y Antonio tiene razón, sé feliz.
Ella se soltó y negó con la cabeza.
- Jacinto y yo nos conocemos desde que éramos adolescentes pero lo reclutaron para el ejército, mis padres arreglaron el matrimonio con los padres de Fernando, me casé amando a Jacinto pero él regresó tarde, yo aprendí a querer a Fernando era un hombre excepcional, él sabía de Jacinto y decidió contratarlo porque el confiaba en mi y en la honestidad de Jacinto.
- no le has faltado a nuestro padre, él ya no está, es tiempo que seas feliz madre - Bruno la abrazó fuerte e igual Antonio.
Miré el cuadro y era algo tierno ver cuánto amor había entre ellos, ahora entendía la lista de Antonio, donde uno de sus puntos era ayudar a Bruno y a su madre ser felices.
Ya estaba trabajando con su madre, pero ¿Bruno?
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Kgerals ❤
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Su Hijo© #Serie 1 Arévalo [Completa]
RomanceGreta tiene una deuda moral con la familia que la crió al quedar huérfana. Por ese motivo cuando se enteró que Antonio el hijo menor de la familia Williams estaba muriendo y su único deseo era dejarle a su madre Clarisa un hijo, no sé negó cuando B...