Le escribo a nadie,y nadie es mi condena.
Le escribo a nadie bajo la luz persa del crepúsculo,
bajo el viejo reloj que marca la sexta hora,
bajo mis ojos llenos de lágrimas ausentes por nadie. Le escribo a nadie.
Por favor no lleves flores a mi entierro si es que por ti muero,
un día todo volverá a ser como antes, el comienzo, el inicio ¡oh el principio!
Y si sigues respirando, desdichada niña, no vuelvas a mencionar mi nombre.
Y si sigues enamorada, taciturna niña , seguirás ausente en mis versos.
Le escribo a nadie para que el alma mía encuentre reposo,
le escribo a nadie por ser esta la ultima vez, hermosa.
Escribiré los versos que envuelvan tu cuello perfumado
y me aseguraré de que sean para ti perfectos,
intachables, justas, extraordinarias promesas,
invádeme con tu añoranza, nostalgia, privación.
Recuérdale a mis versos, que le escriben a nadie,
corazón sangrante que en la lluvia encontró sosiego.