Llamada inesperada

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Cap.29♥

|Narra TN|
Kendall: No te preocupes, si no aceptan nuestra relación... -Interrumpo.
TN: Nos vamos... -Lo abrazo mas todavía- Juntos - Nos íbamos a besar pero una llamada me interrumpe - ¿Hola? -Reconocería esa voz de nerviosismo por donde sea que vaya- ¿Mamá?
Tara: ¡TN! ¡hija al fin! Supe que mañanas salías de la ¡universidad! Yo TN... -Se notaba nerviosa- Necesitamos hablar algo muy importante, es algo muy delicado -Kent Schmidt- Y espero que lo tomes bien - Lo tenía en altavoz para que Kendall escuchara, ya que no podría sola.
TN: ¿En donde nos juntamos? - Kendall me abrazaba y sentía que estaba por llorar, en este tema ambos somos muy sensibles.
Tara: En el café "Count me in" a las 15:30 PM, no faltes hija y recuerda... perdóname y te amo. - Llorar, era lo único que podía hacer. Kendall me abrazó por detrás con fuerza, Logan comprendió que necesitábamos estar solos.
TN: Tu vas conmigo, tenemos que enfrentarlos de una vez - Lo dije firme entre sollozos.
Kendall: Con una condición -Me abraza y toma mi mentón- Juntos por siempre - Lo tomo de las manos y le susurro lo mismo, nos besamos con ternura, pasión y todos esos lindos sentimientos que me vienen a mi cuando estoy con Kendall. Comprendí lo que él quería hacer así que nos fuimos a nuestra habitación, subimos entre besos y abrazos mientras las personas nos miraban algunos raro y otros contentos.

Llegamos a la habitación y cerré con seguro, nuestros besos subían de tono; Kendall me tomó de mi cintura y me lanzó a la cama, para luego llevarme otra vez hacia sus labios tiernamente. Al fundirnos en ese hermoso beso decidí meter mi mano debajo de su polera para sentir esos músculos bien formados que me hipnotizan. El se dio cuenta de lo que quería y levantó sus brazos para que le sacara la polera. Feliz dejé que me sacara mi polera y nuestros roces de cuerpos hizo la situación mas excitante. Kendall empezó a besar mi cuello, y yo tan excitada le quité sus pantalones, me sonrojé en como el bulto de sus pantalones estaba grande. Lo besé en el cuello y rápidamente sacó mis pantalones, nos besamos otra vez y... el y sus malditos juegos, comenzó a rozar sus labios en mis piernas, vientre y pechos, eso me molestaba mucho y me hacía sentir más ansiosa y con ganas de llegar a mas, paso con mi mano en su miembro para que sienta lo que me hace sufrir.


Kendall: Tramposa -Susurra- Veamos si esto te gusta - Comienza a besar mis piernas, luego sube a mi vientre y a mis pechos, luego de eso me quita mi ropa interior.
TN: Ya no juegues, te quiero en mi por favor - Kendall cumplió mi propuesta, sabe que soy algo débil a las caricias, roces y besos de él, entonces entró en mí y me besó el cuello como si estuviera reclamándome mi cuerpo, yo estaba tan hipnotizada que empecé a gemir fuerte sin importar que hay gente afuera, solo éramos él y yo. El aumentaba sus movimientos y yo estaba tan "activa" ya solo me importaba estar con él. En fin ambos caímos rendidos abrazados y nos dimos cuenta que estaba oscureciendo - ¡WOW! las tardes se me hacen eternas contigo.
Kendall: Si hermosa -sonríe- ¿Segunda vuelta? -Abrí mis ojos como platos ya que estuvimos como mínimos dos horas- ¡Solo bromeaba! Estoy más que satisfecho - Me besa y decidí ponerme pijama, ya que como el tiempo esta raro y Carly tiene algunos remedios..., en fin me puse este pijama: unos shorts negro demasiado corto y una polera negra con mis calcetines a cuadros. Y Kendall muerde su labio.
TN: Te he dicho que no me gusta que me mires como si fuera un trozo de carne -Lo abrazo en la cama- Pervertido. - Kendall estaba con sus bóxers y se lanza encima mío.
Kendall: Pero así me amas preciosa -Lo besé y me recuesto en su pecho para luego ver una película- Eres simplemente perfecta mi amor y es tu culpa por ponerte algo ajustado y sexy... - Me reí y lo besé un momento más para luego quedarme dormida.

Al día siguiente, desperté con una sonrisa de oreja a oreja, e iba a abrazar a Kendall, pero no estaba, me puse a mirar por toda la habitación y no estaba su ropa. Esto se me hacia sospechoso porque fui al baño y no estaba ni su cepillo de dientes, ni su desodorante... esto se hacía sospechoso, siento unas manos en mis caderas y todo se tornó negro...

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